Retorno a la casilla de salida. La policía francesa ha detenido este viernes por la mañana a la futbolista Aminata Diallo por el caso de Kheira Hamraoui, la jugadora del PSG brutalmente agredida en el otoño del año pasado en París. Diallo fue arrestada en su domicilio y actualmente se encuentra declarando en una comisaría, según informaron el diario 'Journal du Dimanche' y la emisora de radio RMC. Esta detención se produce tras el arresto esta semana de cuatro sospechosos de haber apalizado a la ex centrocampista del Barça.

El 4 de noviembre del año pasado, mientras regresaba de una cena de equipo en un coche conducido por su compañera Diallo, Hamraoui fue arrastrada fuera del vehículo y la golpearon en las piernas con una barra de hierro. Entonces, esa agresión generó un impacto mediático mundial al conocerse que las fuerzas de seguridad sospechaban de Diallo, que jugaba en la misma posición que Hamraoui y competía con ella por un puesto en el PSG y la selección francesa, como instigadora de la agresión. Hace casi un año, la futbolista, de 27 años, ya había sido detenida e interrogada durante varios días. Pero al final salió en libertad sin cargos. 

Hamraoui apartada del PSG, tras haber acusado a Diallo

Luego, el caso se enredó aún más cuando salió a la luz una relación sentimental entre Hamraoui y el exfutbolista Éric Abidal, en la época en que ambos estaban en Barcelona. Por este motivo, se sospechó de la esposa del exlateral y exsecretario técnico culé. “El tema de Éric Abidal no tiene nada que ver con la agresión que sufrí. La investigación evoluciona. La verdad saldrá a la luz”, aseguró Hamraoui en junio en sus primeras declaraciones sobre este turbio caso, en las que insinuó que la responsable de ello era Diallo.

La tenacidad de las acusaciones de la exjugadora culé contra su compañera comportó que sufriera un ostracismo en el vestuario del PSG, donde varias compañeras le dieron la espalda y apoyaron a Diallo, que fichó este verano por el Grenoble. Actualmente, Hamraoui está apartada del equipo.

Más allá de las consecuencias deportivas, la policía avanzó en la investigación del caso. Privilegia la pista de que el móvil fueron los celos deportivos. Tres de los cuatros sospechosos arrestados esta semana reconocieron haber estado en el lugar de los hechos. Sin embargo, se echan la culpa entre ellos a la hora de determinar quién fue el autor de los golpes con una barra de hierro. Cuando terminen sus interrogatorios, este viernes declararán ante un juez por una eventual imputación.