A punto de llegar al ecuador del 105 Giro de Italia, la novena etapa llevará al pelotón desde Isernia hasta el alto del Blockhaus en pleno corazón de los Apeninos y en la que los ciclistas deberán superar en los 191 kilómetros de recorrido un total de 5.000 metros de desnivel en una jornada que debe clarificar la clasificación general.

Tras el final en el Etna, en la cuarta etapa, que sirvió al español Juan Pedro López (Trek Segafredo) para vestirse de rosa, la ascensión final al Blockhaus, con 13,7 kilómetros de ascensión al 8,5% de media y al menos cinco kilómetros por encima del 10%, será donde los principales favoritos deberán ponerse a prueba a ellos mismos y a sus rivales.

El Blockhaus se presenta como una buena oportunidad, al igual que sucedió en el Etna, para dejar fuera de combate a alguno de los que partieron en Budapest con la vitola de favoritos a la maglia rosa final.

Previamente al Blockhaus, el pelotón transitará por otros cuatro puertos, el último de primera categoría, el Passo Lanciano con 10,5 kilómetros al 7,4%.

Perfil de la etapa 9 del Giro de Italia 2022. Giro

El inicio de etapa será muy exigente y frente las primeras rampas del redescubierto Valico del Macerone, a las que seguirán, prácticamente sin descanso, las de Rionero Sannitico y después el Roccaraso, con tan solo 38 kilómetros cubiertos. Un largo tramo ondulado en ligero descenso llevará al pelotón a los pies del Passo Lanciano, por la vertiente de Pretoro, que se encandenará con la ascensión final al Blockhaus.

Los 13 kilómetros finales son todos cuesta arriba en una carretera estrecha con numerosas curvas cerradas. Durante casi 10 kms la pendiente se mantiene por encima del 9% con picos de hasta el 14%.

A esta etapa llega el español Juan Pedro López (Trek-Segafredo) liderando la clasificación general por cuarta jornada consecutiva, por delante del alemán Lennard Känma, a 38 segundos. Tercero es el estonio Rein Taaramäe (Intermarché) a 58, cuarto el británico Simon Yates a 1:42 y quinto el belga Mauri Vansevenant a 1:47.