Antes con Koeman. Y ahora con Sergi. ¿Y quien sabe si también ocurrirá con Xavi?. Cambian los entrenadores, a la espera de que llegue esa deseada solución desde Doha, pero la vida continúa igual porque el Barça es un equipo insípido, sin puntería alguna, sostenido por un niño que está bendecido.

Busca el club esa pieza que le proporcione estabilidad y solvencia en el banquillo cuando el verdadero problema anida en el césped, como ya se ha visto desde hace meses. No existe mordiente. Ni veneno, capaz como fue al inicio de intimidar (pero no asustar ni meter miedo) al Dinamo de Kiev hasta que Ansu sacó un derechazo que vale un tesoro.

Un tesoro de casi tres millones de euros por el triunfo. Y que le permite al club acceder a la posibilidad de llegar a los octavos de final. Acabado el encuentro, la UEFA tardó pocos segundos en concederle al nuevo dueño del 10 el trofeo de mejor jugador del partido por ese soberbio tanto.

"Creo que centró Òscar", dijo relatando la jugada que nació de un centro raso de Mingueza que dio origen al gol que ha cambiado el panorama europeo para el Barcelona. "Luego rebotó en Frenkie y la pelota se quedó corta", apuntó el 10, aunque, realmente, tocó en un defensa del Dinamo de Kiev. "Le pegué con todo", afirmó después.

Del nueve al uno

Estaba tan mal el Barça que sobrevivió en Kiev gracias a las paradas de Ter Stegen y el remate letal de Ansu. "Era muy importante ganar, menos mal que pudimos llevarnos el triunfo", comentó el meta alemán. "Menos mal…", resopló luego indicando que el Barça sufrió por los contragolpes del Dinamo "o por algún balón en el que no salimos bien desde atrás".

No entiende Ter Stegen que los rivales necesiten tan poco para hacerle daño a su equipo. "En la segunda parte estuvimos mejor posicionados, eso ayuda a los delanteros. Pero, al fin, pudimos mantener la portería a cero, eso nos hace estar felices y contentos", indicó, precisando que el Barça "debe hacer algunos ajustes para que todo el mundo esté en su sitio", reconociendo después que "ese gol de Ansu nos hace estar más tranquilos a todos porque ahora nos llevamos la sensación de calma porque estamos viviendo un momento que no es fácil".

Fati celebra su decisivo gol en Kiev al Dinamo FC BARCELONA

Triunfo con dedicatoria

El triunfo era tan imprescindible como valioso. No basta con mirar el juego, irregular, gris y en ocasiones sin precisión, pero la trascendencia de la victoria, que tenía un destinatario especial, estaba por encima de cualquier otra consideración. "Esta victoria va para el Kun, va para él", precisó Ansu Fati, quien le dedicó ya sobre el mismo césped un derechazo que proporciona un oasis de tranquilidad en un club convulso. Un gol para el nueve argentino, que estará, como mínimo, tres meses de baja por esos problemas cardíacos. "Lo primero es la salud de las personas", apuntó Ter Stegen. 

Ahora, con Laporta quedándose en Barcelona, una expedición del club, integrada por Mateu Alemany, el director de fútbol, y Rafael Yuste, vicepresidente deportivo, volaran a Doha para cerrar el fichaje de Xavi, con la previsión de presentarlo en los próximos y calmados días tras ese fantástico derechazo de Ansu.