El Gobierno ha llegado a un acuerdo con la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) para que ésta asuma los gastos de difusión y producción de los partidos de fútbol femenino de aquellos clubes que no tienen una ventana televisiva para emitir los encuentros, según ha anunciado este jueves el Consejo Superior de Deportes (CSD). 

El director general de Deportes, Albert Soler, ha sido el encargado de negociar esta propuesta con la Federación, a la que ha agradecido su esfuerzo para facilitar las retransmisiones deportivas y permitir así una mayor visibilidad del fútbol femenino, que el pasado 15 de junio vio aprobada formalmente su profesionalización. 

El pacto alcanzado para la difusión televisiva de los encuentros es solo para la actual temporada y la iniciativa es voluntaria, es decir que serán los propios clubes quienes decidan si quieren o no participar. En cualquier caso, no recibirán dinero por las transmisiones. 

El CSD calcula que, de apuntarse los 12 clubes que carecen de canales de difusión, el coste para la RFEF sería de unos dos millones de euros. Los partidos podrían verse en TeleDeporte (TVE) y la plataforma digital Footters. 

Actualmente solo cuatro clubes –Real Madrid, Futbol Club Barcelona, Athletic Club y Sevilla- disponen de contrato televisivo o plataforma propia para emitir los partidos. 

Apostar por el diálogo

Por otro lado, el CSD sigue apostando por el diálogo para intentar que los 16 clubes que integran la actual competición de Primera división acepten por unanimidad los futuros estatutos que deberán regir el desarrollo de la Liga profesional de fútbol femenino. 

El pasado 27 de agosto, el CSD recibió una propuesta de estatutos apoyada por 12 de los 16 clubes. Como el Consejo sigue pensando que es preferible contar con la unanimidad de todos los participantes amplió el plazo hasta el 15 de septiembre. Sin éxito. Ahora se da un margen de seis meses para ver si se superan las líneas rojas y se logra cerrar un acuerdo sobre la cuestión estatutaria.

El plan del CSD es invertir 31 millones en los próximos tres años en la Liga profesional de fútbol femenino. Cinco millones al año se destinarán a mantener la estructura ejecutiva de la Liga, mientras que los otros 16 millones –procedentes de los fondos europeos de recuperación- servirán para mejorar las infraestructuras o campos de fútbol de los clubes que lo necesiten. 

Todos deberán presentar un proyecto para recibir los recursos del Estado que, en ningún caso, podrán usarse para pagar los sueldos de las jugadoras. El Gobierno asumiría así los costes que supone arrancar la Liga hasta que ésta pueda generar sus propios recursos. Fuentes del CSD admiten que en este momento hay un “nudo” sobre la cuestión de los estatutos que impide hacer avanzar el proyecto.