La UD Ibiza-Ushuaïa Volley no levanta cabeza en este 2021 y sigue mostrándose como un equipo poco consistente ante los rivales. Ayer encajó otra derrota esta temporada, la undécima y la tercera consecutiva, que le hacen seguir en blanco en el nuevo año. Un Melilla Sport Capital granítico y que supo aprovechar a la perfección las debilidades y las carencias de los isleños, se llevó un contundente triunfo por 0-3 del Pabellón municipal de Es Viver. Los norteafricanos se vengaron así de la derrota sufrida en la primera vuelta por 2-3.

La Copa del Rey, en la que los pitiusos entraron al límite y con la campana, está a la vuelta de la esquina y el CV Eivissa desprende muy malas sensaciones para el torneo del K.O., que se disputará del 5 al 7 de febrero en Las Palmas de Gran Canaria. El Teruel, que ya ganó hace unos días a los ibicencos, será el primer rival de estos.

Es cierto que el encuentro de este sábado frente al Melilla fue igualado, pero nunca dio la sensación de que la UD Ibiza, que notó la baja por lesión de su opuesto Wallaf Oliveira, fuese capaz de llevarse el gato al agua.

En el primer set, los celestes mantuvieron la compostura hasta el 15-15, pero el tramo final el bloqueo del Melilla y los errores del conjunto local dejaron la manga en 19-25.

Por idéntico resultado se resolvió el segundo episodio de una película que adquiría tintes dramáticos para el equipo ibicenco, que siempre fue a remolque del rival en el marcador.

Con 0-2 en sets en el global, parecía una empresa imposible la remontada de la UD Ibiza-Ushuaïa, que nunca pudo contrarrestar la eficacia del Melilla. Con el 7-16 ya estaba encarrilada la victoria de los norteafricanos, que sellaron el 15-25 con un ataque de Riganti. Se rubricó así un 0-3 en contra para un bloque ibicenco que debe mejorar muchísimo en lo que queda de temporada si quiere estar más arriba en la clasificación de la Superliga.

Pero vienen curvas para los pitusos, que este miércoles visitarán al Urbia U Energía Palma para jugar el derbi balear, en el partido que fue aplazado en su día por culpa de los casos de coronavirus que afectaron al equipo mallorquín.

Aitor Barreros, entrenador del bloque pitiuso, lamentó la derrota ayer. «Ellos la verdad es que han sido un bloque durante todo el partido, no han cometido casi errores y al final eso se premia», dijo el técnico.