Raúl Muñoz Garrote (Andújar, Jaén, 06-03-1991) da un paso al frente para analizar la delicada situación por la que atraviesa la UD Ibiza-Ushuaïa Volley en la Superliga masculina tras encadenar tres derrotas consecutivas y alejarse de la Copa. El calendario, el cansancio físico, la bisoñez de la plantilla€ El capitán del equipo ibicenco enumera algunos de los factores que han llevado al conjunto de Aitor Barreros a la décima posición de la tabla, aunque no busca excusas y asegura, sin atisbo de duda, que el plantel celeste acabará demostrando por qué es uno de los «cuatro primeros» equipos de España.

¿Cómo están los ánimos en el vestuario después de las últimas derrotas?

A todos nos sorprenden un poco los resultados que estamos teniendo y no encuentro una justificación real para esta situación. Los ánimos están decaídos porque no esperábamos estos resultados, no estamos trabajando para esto y es chocante para lo que merecemos. Hay que ponerle pasión, entrega, trabajo y los resultados van a llegar seguro.

¿Recuerda alguna dinámica tan negativa a lo largo de sus años en la Superliga?

No, es la primera vez. También es la primera vez que coincido con gente tan joven. Somos un equipo con jugadores de mucha calidad pero la experiencia es un plus y estos temas anímicos, de incertidumbres o de presión, se notan. La experiencia es un valor inalcanzable para los jóvenes, no tienen las herramientas para salir de eso, pero por otro lado tenemos el factor de las ganas y el trabajo, que eso lo tienen más los jóvenes que los veteranos.

¿Cuántas posibilidades da a su equipo para clasificarse para la Copa del Rey?

Yo hasta que no esté agotada la última bala en la recámara siempre voy a apostar por todo. Hasta que no vea el punto 25 que nos diga adiós a la Copa del Rey, no me voy a conformar con decir que es difícil de alcanzar. Cuando sea imposible lo asumiré y se trabajará para no volverlo a repetir. Pero hay que disparar la última bala.

¿Según sus cálculos, ¿para estar en la Copa deben ganar los cuatro próximos partidos de Liga?

Sí, tenemos que ganarlos y además por 3-0 o 3-1, no nos vale un 3-2, sin contar lo que pasó en Soria con la derrota de Río Duero [rival directo de los ibicencos] ante Illa Grau. El deporte es así. Nos hizo un favor, en principio, pero no podemos depender de los favores de nadie. Nuestro equipo, sin desmerecer al resto, es para estar entre los cuatro primeros y tenemos que depender de nosotros y no ir a expensas de las migajas que nos den otros.

Cuatro finales en solo 10 días. ¿Cree que competir con tan poco tiempo entre partidos está perjudicando a la UD Ibiza-Ushuaïa?

Nos está perjudicando el calendario que hemos tenido, con los más fuertes en las cinco primeras jornadas y los viajes más complicados también. No son excusas, es la realidad y mirando objetivamente nuestro calendario ha sido el peor en todos los sentidos. La segunda vuelta será favorable, pero tenemos que centrarnos en estas cuatro finales.

¿A qué atribuye la crisis del equipo? ¿Es un problema físico, técnico, de amplitud de plantilla?

Es muy difícil esta situación porque si analizamos cada partido, ha sido en algunos casos por situaciones arbitrales, que repercuten mucho porque el estado anímico influye muchísimo. Siempre hemos tenido que correr cuesta arriba, no es lo mismo que con el viento a favor. Si a esto le añades el tema calendario, la cercanía entre partidos... Encima los nuestros casi todos han ido a cinco sets y tenemos un cansancio extra. Pero yo creo que es un tema anímico.

Detalles que nos han ido perjudicando, no hemos sabido afrontarlos y nos han arrastrado como una ola.

En algunos partidos se le observa visiblemente molesto o frustrado en la pista. ¿Como capitán, siente impotencia?

Yo soy muy competitivo, soy muy exigente y conmigo mismo, por mil. Siempre ayudo mucho al equipo y esta situación es cierto que me frustra. No me gusta ver perder al equipo ni dar una mala cara, siempre espero dar la mejor versión de mí mismo. Si no me encuentro bien y me aborda la situación de que nos arrollan, es difícil no poner mala cara.

¿Cree que Aitor Barreros y la actual plantilla pueden levantar esta situación?

Yo considero que sí. Aitor puede parecer un entrenador atípico, porque esperamos que todos sean muy nerviosos, que griten y tiren de los pelos, pero Aitor tiene una personalidad muy distinta. Estamos entrenando mucho, Aitor no cesa de ponernos a trabajar, de estudiar al rival, de hacer el scouting. Este es un mal ciclo que nos ha pillado. Si no estuviéramos trabajando, lo diría, pero es frustrante porque no merecemos estar en el lugar que estamos. Empezamos ganando los partidos y luego no sabemos superar los obstáculos.

¿El ambicioso objetivo de luchar por todos los títulos es ya una quimera?

Como he dicho, hasta que no estemos sin balas en la recámara no puedo decir otra cosa, hasta que no queden balas para disparar no dejaré de luchar por todo, y es una opinión colectiva creo, incluyo a todos. La segunda vuelta nos es muy favorable y será cuando veremos que la Liga es muy larga y que no está todo dicho; torres más altas han caído y los últimos serán los primeros. Como dice el refrán.

A nivel personal, ya fue MPV una jornada y está ofreciendo un alto nivel. ¿Está satisfecho?

No estoy del todo satisfecho porque estoy muy sobrecargado físicamente. Ya no tengo 22 años como cuando vine por primera vez a Ibiza. Son muchos partidos, a cinco sets, desplazamientos, eso pasa factura, y si la cabeza está 'estresada' te puedes imaginar que no es una buena combinación. Pero es un tema grupal también, no hay que ponerse nerviosos, son situaciones que ocurren, parece que ahora tiene mayor magnitud por los tres partidos perdidos, pero queda mucha liga.

¿Por qué decidió volver al Ushuaïa Ibiza en esta segunda etapa?

Me hizo volver Piero Molducci. Yo iba a ir a otro país a jugar, Piero me llamó y me dijo que aquí podría ir muy bien. Con él gané una Superliga y una Copa del Rey, Y yo necesitaba volver a casa. Uno de los motivos de continuar esta temporada es que siento el club como mío. Las Baleares son como mi segunda casa, Estoy acabando la carrera de Educación Primaria y voy a hacer las prácticas en un colegio de Ibiza.