La SD Portmany ganó ayer el primer derbi pituso de la temporada 2020-21 al imponerse por 1-2 al CD Ibiza en el estadio Can Misses, que registró una magnífica entrada, lo que evidenció que los aficionados tenían ganas de ver fútbol.
Los de Sant Antoni basaron su triunfo en el trabajo físico y táctico y en su máxima tensión y atención. Fue un Portmany totalmente distinto al de la temporada pasada, no tan sólo porque en la alineación titular sólo había tres futbolistas que estaban en el último once del curso anterior (Manu, Robert y Gabri), sino también por su espíritu de lucha, concentración y seriedad.
Por su parte, el CD Ibiza, que salió a jugar con siete jugadores que fueron titulares en el último partido de la anterior campaña, demostró que será un equipo que luchará por el campeonato, sin ningún género de duda porque tiene una plantilla de contrastada calidad, pero ayer no estuvo acertado de cara a puerta. Dominó durante todo el choque, pero le faltó chispa ofensiva y más profundidad a la hora de afrontar los últimos metros, en los que su rival fue más resolutivo y estuvo más concentrado.
Control local
Control local
El dominio de los hombres de Alberto Gallego fue casi total y absoluto desde el saque inicial, pero les costó llegar al área del Portmany. El equipo de Vila no encontró nunca el camino recto y se perdió en centros de fácil resolución para una defensa portmanyista muy centrada.
El Portmany, sin embargo, no sólo se dedicó a defenderse. Supo cómo y cuándo salir con rapidez y, sobre todo, ayer brillaron con luz propia tres jugadores: Piera, Robert y Ángel, que combinaron con mucho peligro. De hecho, el primer aviso lo dio Joan Piera en el minuto 35, pero su remate fue flojo, aunque un minuto después volvió a mostrar su calidad controlando un balón y dejándoselo a Ángel para que marcara el 0-1 con el que los equipos se fueron al descanso.
El dominio del CD Ibiza en la reanudación fue aún mayor, contrarrestado por un Portmany perfectamente escalonado en todas sus líneas. Fue un querer y no poder por parte local.
El empate no pudo llegar en ninguna jugada trenzada. Tuvo que ser desde el punto de penalti y Losada fue el que marcó el gol de la igualada local al transformar una pena máxima muy protestada, con tangana incluida, por el equipo de Sant Antoni a la hora de juego.
La igualdad animó a los de Vila, pero el que de verdad se vino arriba fue el Portmany, que marcó su segundo tanto 13 minutos después gracias a otra genialidad de Joan Piera, un jugador que ayer demostró tener muchísima calidad y que puede dar bastantes alegrías a la afición del renovado Portmany, que ahora sí sabe a qué quiere jugar.
Los sanantonienses se medirán el próximo fin de semana en casa al Cardassar, mientras que los de Vila visitarán al Andratx.
