Amadeo Salvo, presidente de la UD Ibiza, aprovechó ayer la presentación de Davo como nuevo futbolista del club para hablar sobre el comienzo de la temporada 2020-21 en la Segunda B, que aún no está claro debido a la pandemia del coronavirus, aunque en primera instancia se propuso la fecha del 26 y 27 de septiembre. El dirigente aseguró que existe «una incertidumbre» y «la seguridad y la sanidad es lo primero», pero también declaró que «con los protocolos adecuados» se puede «iniciar la competición lo antes posible». «No podemos estar pagando salarios y que no se empiece la competición», dijo.

«Yo digo lo antes posible por si hubiera que parar en algún periodo. Cuanto antes empecemos mejor», subrayó Salvo, que también apuntó que en la Segunda B «los clubes tienen la suficiente capacidad financiera para hacer los test [de Covid-19] que el protocolo exija a sus futbolistas».

El máximo dirigente de la entidad de Vila dijo que los clubes no se pueden escudar en que no tienen recursos económicos cuando en la categoría de bronce reciben subvenciones por parte de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), de unos 200.000 euros, y «del 1% que la Liga de Fútbol Profesional, a través del Real Decreto de las televisiones, concede al fútbol no profesional». «Aquel que diga que no la tiene [capacidad financiera] que no empiece la competición. Que no ponga en riesgo ni frene la competición a la inmensa mayoría que estamos de acuerdo en hacerlo».

«Por lo tanto, yo creo que existen los medios, existen los protocolos para que haya seguridad y se pueda empezar la competición. Lo de que no hay dinero... Si el Ibiza tiene que invertir 30.000 euros en test y tiene un presupuesto, reducirá 30.000 euros del coste de su plantilla. Pero no voy a esperar que me regalen algo que no le regalan a ninguna empresa española, que los tienen que pagar», declaró Salvo.

Para el dirigente de la UD Ibiza «esto es un tema muy serio» y del que «hay que empezar a hablar claro». «La Federación tiene que empezar a tomar posiciones y mover aquello que es su mayor patrimonio, que son los clubes y sus futbolistas. Si no lo defiende, existe una desprotección, que es en lo que nos encontramos ahora. Sobre todo los clubes profesionales», añadió.

Porque según el presidente de la UD Ibiza, la Segunda B es considerada «ilógicamente» no profesional «cuando el propio reglamento de la Federación te exige que el 50 por ciento de las fichas, prácticamente, sean profesionales».

Para él, una de las opciones es la reestructuración del campeonato «de una vez» y «que hagan lo que deberían haber hecho y nos evitaríamos todos estos problemas», en referencia a la creación de la Segunda B Pro, que siempre ha defendido. «Se ha demostrado que era el momento de haber hecho una reestructuración ahora. Ya lo dijimos en su momento», recalcó, en un claro dardo hacia la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), de la cual es directivo.

Según Salvo, «igual que se ha subido a cuatro equipos sin jugar [Lealtad, Alcoyano, Marino de Luanco y Linares] se podía haber reestructurado una Liga Pro», criticó el máximo mandatario de la UD Ibiza, que opinó que la Segunda B «se ha convertido en un cajón desastre», una «Liga Frankenstein donde todo ha valido». «Ahora, en lugar de ser 80 equipos somos 102 y resulta que hay muchos más problemas de organización y de todo», destacó.

Malas prácticas económicas

Malas prácticas económicas

Por otra parte, el presidente de la UD Ibiza indicó que saben «cuáles son los presupuestos mínimos» y también «lo que están pagando a los futbolistas y cómo» las entidades de la categoría. Un aspecto este último, el de «cómo están cotizando determinados clubes [de los que no dio nombres] a sus futbolistas», y en el que va a «entrar directamente».

Preguntado sobre ello, comentó lo siguiente: «No tengo dinero para test pero sí para estar pagando futbolistas, jugadores con contratos en los que se declara parte de forma oficial y parte no. Automáticamente, clubes de Segunda B que reciben una subvención del Estado convierten el dinero A en B por arte de magia, por arte de 'birlibirloque' se convierte dinero oficial en no oficial. Entonces, estamos muchos clubes cansados de todo esto y hace falta una reestructuración ya».

Para Salvo, si no se emprende esta reestructuración «al final esto es dar dinero para que no se hagan las cosas bien». «Es una competencia desleal tan grande... Es como si este hotel en el que estamos haciendo la presentación, que paga sus impuestos, tuviera un hotel al lado que todo el mundo sabe que no paga sus impuestos de forma correcta pero la Confederación Hotelera lo tiene registrado con los mismos derechos que el que paga. Esto se tiene que acabar», declaró el presidente de la UD Ibiza, que pidió un «control» porque «si no es una Liga adulterada desde el primer minuto», terminó diciendo.