La UD Ibiza continúa en las nubes, disfrutando de un mes de enero que pasará a la historia del club celeste por haberle plantado cara al todopoderoso FC Barcelona en la Copa del Rey y por encadenar tres victorias consecutivas en Liga que le confirman como candidato a pelear por el título.

El equipo ibicenco disfrutó de una dulce resaca de la borrachera que supuso la inolvidable fiesta copera, y ayer derrotó al Sanse (2-0) con dos auténticas obras de artes firmadas por Cirio y Raí por las que bien mereció la pena regresar a Can Misses, ese teatro de los sueños celestes en el que se está convirtiendo el estadio municipal.

El colista saltó al césped con una defensa poblada con cinco futbolistas, aunque no fue su propósito plantar el autobús y encerrarse a esperar. Por momentos, el Sanse llegó a disputarle la posesión del balón a un Ibiza que se presentó con numerosas novedades, como Lucas Anacker en la portería, Toni Arranz en la medular y Diego Mendoza en la punta de ataque. También salió de inicio el capitán Sergio Cirio, que se mostró muy participativo actuando entre líneas.

Gonzalo realizó el primer remate a portería a los 15 minutos, con un cabezazo carente de peligro a la salida de un saque de esquina. En la jugada siguiente, Javi Lara intentó sorprender a Irureta desde el centro del campo, pero no halló portería. Le faltaba más precisión en los pases y concreción en las transiciones ofensivas a un equipo pitiuso que ponía a prueba su fortaleza física.

En el minuto 23 Javi Pérez protagonizó la ocasión más clara hasta el momento, con un disparo escorado que se marchó al lateral de la red después de percutir en el área por el flanco derecho. También la tuvo Sergio Cirio al filo de la media hora, al aprovechar un saque rápido de falta de Javi Lara, pero el tiro cruzado del zurdo se marchó desviado.

El primer remate a portería del Sanse no llegó hasta el minuto 36, en un disparo lejano de Raúl Hernández que detuvo sin problemas Lucas. El conjunto de Alfaro no estaba muy fino con el balón y la primera parte se esfumaba sin pena ni gloria. Hasta que Cirio salió al rescate con una exquisita genialidad. Tras una larga incursión de Fran Grima por la banda derecha, Raí sacó un excelente centro al balcón del área y el capitán celeste, sin dejar caer el balón, lo enganchó a bote pronto, fuerte y ajustado junto al palo izquierdo de la portería defendida por Irureta (1-0, min. 41). Un tanto de bellísima factura que llenó de color una gris primera mitad en el coliseo ibicenco.

Incómodos, pero resolutivos

Saltó valiente el colista a la segunda mitad, adelantando la línea de presión hasta obstruir la salida de balón de la UD Ibiza. Los celestes sufrieron durante los primeros minutos, incómodos frente a un rival que salió sin complejos a por el empate. Pablo Alfaro metió músculo en la medular dando entrada a Sibo en lugar de Javi Lara.

Hacia el minuto 60, Fer Ruiz aprovechó una indecisión de Rubén para perfilarse en el vértice del área y buscar el palo largo, pero su lanzamiento se fue muy desviado. Poco después falló Gonzalo en un pase horizontal y Pablo Aguilera lo aprovechó para enfilar hacia porteria, pero en el último momento se cruzó Quintanilla para despejar a córner. Los despistes podían costarle muy caro al conjunto ibicenco, como ocurrió ante el Langreo en el primer encuentro del año.

Era el momento perfecto para que otro orfebre del balón hiciera su aparición estelar para sentenciar el triunfo. Raí se trabajó con esmero el tanto. El brasileño robó un balón en ataque y provocó el córner que alumbraría el 2-0. El '11' de los celestes cazó un esférico muerto en el punto de penalti y sacó una volea perfecta con la diestra para poner el esférico en la misma escuadra (min. 76). Otra joya que disfrutó con pasión la afición pitiusa. Los últimos minutos de la función también sirivieron para asistir al debut del extremo zurdo Borja Martínez. Promete.