Uno de los asuntos que más preocupan tanto en la UD Ibiza como en el departamento de Deportes del Ayuntamiento de Ibiza es la adaptación de las instalaciones municipales a la progresión deportiva que está protagonizando el primer equipo celeste, cuyo objetivo es dar el salto a la Segunda División. Tener un equipo competitivo en la ciudad va ligado a una adecuación de las infraestructuras, en este caso la necesidad de un campo de césped natural si se pretende jugar en la categoría de plata.

El alcalde de Vila, Rafa Ruiz, admitió ayer en Radio Ibiza que están «trabajando en ello» y que será el estadio de Can Misses el recinto en el que se instalará la superficie de hierba.

«Ya tenemos futuros trabajos y reuniones adelantadas: con la Liga, para ver lo que exige, saber las facilidades que hay para el ayuntamiento, y trabajaremos para dar respuesta, entendiendo que el club va muy bien», indicó Ruiz, antes de advertir de que no pueden «precipitarse» ni tampoco «hipotecarse» con la instalación.

«Tenemos todo calendarizado, el tema complejo sería el césped natural, no solo implementarlo sino que necesitaríamos otro campo para los chavales y donde pudiera entrenar el Ibiza. Lo que tenemos pensado es poner césped natural en Can Misses. Tenemos que ir paso a paso y no precipitarnos. Es verdad que el proyecto más serio y asentado es este [el de la UD Ibiza]. Lo estamos coordinando todo y en su momento se dirá», puntualizó en los micrófonos de la Ser.