La Peña Deportiva ha sufrido este mediodía en su visita a tierras asturianas uno de los mayores descalabros deportivos que se le recuerdan a domicilio, tras caer derrotada estrepitosamente en Mareo ante el Sporting de Gijón por un escandaloso tanteo de 6-0, en un partido que los ibicencos ya perdían al descanso por un contundente marcador de 4-0.

Y es que hoy la Peña Deportiva ha sido ante el filial gijonés una auténtica caricatura del equipo al que nos tienen acostumbrados, ya que los de Raúl Casañ se han mostrado excesivamente blandos, como un conjunto completamente deslavazado, desordenado y carente de toda tensión y concentración en las tareas defensivas. La Peña ha sido en Gijón un verdadero coladero para los cachorros del Sporting, que han sabido explotar las debilidades de los visitantes con acciones rápidas por las bandas que han obtenido el premio del gol, prácticamente, en todas sus llegadas a los dominios de Seral, al que han fusilado varias veces completamente solos y sin ninguna oposición los pupilos de Samuel Baños, que se han dado hoy un festival de autoestima a costa de una Peña Deportiva esta jornada se ha pegado un tremendo batacazo en el que ha encajado media docena de goles para olvidar.

Tras este severo correctivo en tierras asturianas, la Peña desaprovecha la opción de haberse metido de nuevo entre lo cuatros primeros clasificados, después de la derrota de ayer del Rayo Majadahonda, y baja hasta el sexto puesto, siendo superada ahora en la tabla por el Pontevedra, con el que empata, no obstante, a 28 puntos.