Sergio Sevilla dejó este viernes de ser entrenador del Puchi y ayer, el equipo ibicenco, ya sin el madrileño al mando, rompió una racha de cuatro derrotas para conseguir ante Agustinos Alicante el primer triunfo de la Liga en su debut en Santa Eulària (32-18).

Aunque no han trascendido los motivos de la renuncia, desde el club confirmaron que deja el primer equipo aunque seguirá llevando tareas de coordinación y equipos de base. A la espera de encontrar un nuevo entrenador, ayer fueron las propias jugadoras del Puchi quienes se autogestionaron en el primer encuentro disputado en casa.

Las ibicencas tiraron de orgullo y calidad y pronto pusieron tierra de por medio con las alicantinas, que se marcharon al descanso con un claro 15-7 en su contra.

El Puchi no levantó el pie del acelerador tras el paso por vestuarios. Con Raquel Bejarano y Ana Boned al mando de las operaciones, el hasta ayer colista se reivindicó ante su afición con un auténtico vendaval ofensivo (20-10, min. 38, 29-13, min. 50). Las de Santa Eulària cerraron el choque con un triunfo coral por 32-18 a la espera de conocer a su nuevo técnico.