El alarmante retraso que acumula el Consell de Ibiza para abonar las ayudas pendientes con clubes que compiten en Ligas nacionales y con organizadores de eventos deportivos, correspondientes a la temporada 2017-18, está llevando al límite a entidades como el Ushuaïa Ibiza Vóley o el HC Eivissa de balonmano.

Son dos de los 29 beneficiarios de una línea de ayudas que asciende a 388.000 euros y que los afectados esperaban haber cobrado hace al menos seis meses. De hecho, esta situación desembocó en la destitución de David Ribas como conseller de Deportes -a mediados del pasado mes de marzo- y en un decreto de Presidencia con el que se pretendía agilizar los trámites administrativos para saldar la deuda.

Sin embargo, tres meses después de aquel movimiento político el pago de las subvenciones (justificadas y aprobadas) continúa atascado en el servicio de Intervención, por una serie de flecos que se están «subsanando», según informaron ayer desde la máxima institución insular.

Clubes y promotores se encuentran asfixiados y muchos de sus directivos endeudados por tener que hacer frente a nóminas y facturas. El hecho de tener que adelantar grandes sumas de dinero les está llegando a afectar en el terreno laboral y personal; de ahí que muchos se planteen renunciar a nuevos proyectos deportivos de nivel nacional.

En el HC Eivissa están llegando al límite. «Nos estamos ahogando a nivel particular. No podemos aguantar más porque estamos sufriendo personalmente con nuestro patrimonio», sostiene un miembro de la directiva. El club lleva meses pendiente de percibir los 25.000 euros comprometidos con el Consell por el equipo de Primera Nacional, la tercera máxima categoría del balonmano masculino estatal, para la campaña 2017-18. Desde la entidad naranja recuerdan que para la temporada recientemente concluida (2018-19) ni siquiera se han aprobado las bases de las ayudas a clubes de ámbito nacional y para eventos, que ascenderán a 360.000 euros según avanzó el director insular de Deportes en funciones, Fernando Gómez.

Estudian movilizaciones

En el club de Vila no quieren que esta anomalía administrativa «quede en el olvido» y no descartan llevar a cabo movilizaciones junto con otras entidades afectadas si el Consell no cumple con su compromiso en las próximas fechas. Y es que el malestar ha ido en aumento en las últimas semanas por el incumplimiento de los plazos que se ofrecían desde la máxima institución insular.

Su presidente en funciones, el socialista Vicent Torres, se había comprometido a desbloquear las ayudas antes de las elecciones autonómicas y municipales del 26 de mayo, pero 20 días después de los comicios continúa sin autorizarse la orden de pago.

Según la información que maneja esta redacción, a partir de la próxima semana se pretende hacer efectivo el abono de estas cantidades pendientes una vez reciban el visto bueno por parte de Intervención.

En el Ushuaïa Ibiza Vóley la paciencia también está a punto de agotarse. La deuda contraída con el conjunto de la Superliga masculina de voleibol es de 35.000 euros, una cantidad necesaria para liquidar sueldos y facturas, y para abordar a primeros de julio la inscripción del equipo para la próxima temporada, que ronda los 10.000 euros.

La planificación de la plantilla, aunque avanzada, tampoco se puede concretar mientras no se certifique el cobro de la subvención y la aprobación de las nuevas líneas de ayuda. «Se están cargando el deporte ibicenco y para nosotros peligra la Superliga. El próximo equipo de gobierno del Consell debería ponerse con las ayudas de 2018-19 y 2019-20 para anticipar alguna cantidad», indicaron fuentes del Club Voleibol Eivissa.