La SD Formentera encara hoy (18 horas) ante el Lealtad en el estadio Les Caleyes de la localidad asturiana de Villaviciosa un duelo crucial para mantener vivas sus esperanzas de avanzar hasta la última eliminatoria y poder pelear por dar el salto a la Segunda División B, categoría por la que luchan los rojinegros con la intención de regresar justo una temporada después de haber perdido su sitio en dicha competición.

En este sentido, Iván Gómez Roa, entrenador del Formentera, que cuenta para este desplazamiento con las bajas de Bonilla, sancionado, y con las de los lesionados Gorriz y Cifré, indicó: «Somos conscientes de que no tenemos hecho absolutamente nada. Contamos con una ligera ventaja, pero tenemos que ir allí a competir lo mejor posible. Nos vamos a enfrentar a un muy buen rival que ya demostró aquí que tiene suficientes argumentos para ponernos en dificultad. Vamos a tener que estar muy metidos en el partido para para poder pasar la eliminatoria».

Así, con esa ventaja parcial en favor de los formenterenses, tras el resultado de 1-0 cosechado el pasado domingo en la pitiusa sur en el partido de ida de esta segunda eliminatoria de la fase de ascenso, el enfrentamiento de esta tarde entre isleños y asturianos promete hacer saltar chispas tanto en el terreno de juego como en las gradas, dado que ambas escuadras se muestran convencidas de poder hacerse hoy con un marcador que les permita imponerse en esta ronda y que les acerque un pasito más a la categoría de bronce del fútbol nacional.

Samuel Baños, entrenador del Lealtad, destacó sobre el choque de vuelta: «Tenemos mucha ilusión en poder protagonizar una remontada y darle la vuelta a la eliminatoria, con todo el respeto que se merece nuestro rival. Con humildad, pero también con ambición, confíamos en poder superarles». «Sabemos después de conocerles en la ida que va a ser complicado porque el Formentera tiene experiencia, cuenta con muy buenos jugadores y le gusta jugar el balón, aunque sabemos por experiencia propia, tras lo que nos sucedió anteriormente contra el Getafe B, que cada partido es totalmente diferente y que toda eliminatoria se puede voltear», añadió el técnico del conjunto asturiano, que no cuenta con bajas para este decisivo encuentro.

A pesar de esa mínima ventaja inicial, apear al Lealtad no será una tarea fácil para los de Iván Gómez Roa, quienes tendrán que emplearse a fondo para superar cuantas adversidades les esperan en el feudo astur. No en vano, desde el club maliayo, apelando a la épica de una hipotética remontada por parte de los suyos, se ha hecho un llamamiento a su afición para que acuda a arropar a sus futbolistas, y hasta se han rebajado los precios de las entradas para que las gradas de Les Caleyes presenten un lleno absoluto, al objeto de convertir su estadio en un fortín y que su hinchada presione y cree un ambiente agobiante en contra del Formentera.

Ante tal panorama, Javi Boix, delantero del cuadro pitiuso, además de restar importancia a tal eventualidad, puso como contrapeso a tal presión la original reflexión que recientemente ofreció a una cuestión parecida Kyle Lowry, base de los Toronto Raptors, flamantes campeones de la NBA, antes del partido decisivo de la final contra Golden State Warriors: «¿Sentir presión? Lo único que puede decir, tal y como manifestó hace unos días un jugador de la NBA al que le preguntaron por algo parecido, es lo que él contestó, que presión es lo que mi madre y mi abuela sentían para poder alimentarme». Así las cosas, el atacante rojinegro puso en valor la «motivación» del vestuario formenterense, conjurado para dar otro golpe de autoridad y «pasar» a la tercera y última eliminatoria.

«Estamos con mucha ilusión y con muchas ganas de hacer lo que haga falta para pasar de ronda. El Lealtad me pareció un equipo fuerte, con la ideas claras y con un buen trato del balón, además de tener mucho peligro, pero nuestro objetivo es pasar la eliminatoria. Vamos a salir a jugar siendo valientes y a tratar de hacer gol», aseguró, al respecto, Javi Boix.