Caras de felicidad, de ilusión y de entusiasmo, unidas a una infinidad de pedaladas para hacer germinar en los más pequeños de la casa la afición por la bicicleta y una pasión activa por el mundo del ciclismo, de manera que la gran familia ciclista de Eivissa siga aumentando de cara al futuro. Así, bajo esas premisas, se puede resumir el éxito cosechado este domingo en Sant Antoni por la Mini Vuelta a Ibiza 2018, una cita deportiva de carácter lúdico y no competitiva, que celebró este año su segunda edición con la participación de cerca de una treintena de jóvenes ciclistas de entre 5 y 16 años.

«Hablamos con los clubes de la isla que tienen escuelas de ciclismo, que son el Master Team Ibiza y el Eiviatletisme, y decidimos darle continuidad a este proyecto que iniciamos el año pasado. La idea es desarrollar una actividad no competitiva para que los niños se lo pasen bien y puedan disfrutar de un recorrido de cuatro kilómetros completamente vallado y cortado al tráfico, saliendo desde la misma rampa de la que lo hacen poco después los mayores en la prueba de la contrarreloj. Para ellos se trata de una experiencia muy bonita y en la que se divierten mucho», indica, al respecto, Juanjo Planells, organizador de la Vuelta Cicloturista a Ibiza.

Aprendiendo a sentirse ciclistas

Planells asegura sentirse «encantado» con el imparable «tirón» que está teniendo esta actividad, ideada especialmente para lograr que los niños y las niñas de la isla puedan sentirse por un día como verdaderos ciclistas y que noten que también ellos forman parte de un evento deportivo de gran trascendecia como es la ronda cicloturista ibicenca.

«Ya que tenemos la suerte de contar en la Vuelta Cicloturista con grandes campeones como Abraham Olano, Igor Astarloa e Iván Gutiérrez, y que tenemos todo el montaje de la infraestructura instalado, qué mejor idea que intentar que los niños lo puedan disfrutar y lo puedan vivir también en primera persona. En lo primero que pensamos siempre es en fomentar el ciclismo en las categorías inferiores y en las de iniciación», destaca el máximo responsable de la organización de la prueba.

Asimismo, Juanjo Planells hace hincapié en la importancia de convertir a los más pequeños en partícipes de las diferentes actividades que se organizan de forma paralela a la ronda ciclista: «Además de hacerse fotos con Olano, Astarloa e Iván Gutiérrez, me sorprendió muchísimo que lo que más ilusión les ha hecho a los niños, sobre todo, es poder conocer a los ciclistas discapacitados que han corrido este año la vuelta y que los pequeños se volcaran tanto con estos deportistas tan especiales. Estaban como locos haciéndose fotos con Ricardo Ten y con todos ellos».

Nuevos retos para el futuro

Una vez abierta la senda para una cada vez mayor participación de los más pequeños en la ronda cicloturista, el próximo objetivo para las nuevas ediciones de la Mini Vuelta a Ibiza, según apunta el responsable de la prueba, pasa por ir «introduciéndoles» en algún tipo de «competición».

«La idea es que cada vez participen más niños y que se sientan importantes en la Vuelta. Nos estamos planteando que igual para el año que viene hacemos un poco de competición exclusivamente para ellos, aunque ya veremos. Lo hablaremos con los clubes y con la delegación, a ver cómo podemos hacerlo para que cada año más niños puedan disfrutar con nosotros del ciclismo», puntualiza Planells.