La fiebre del motor llega hoy a sa Cala, donde un total de 53 vehículos se darán cita en la trigésimo tercera edición de una de las pruebas de montaña más emblemáticas del panorama nacional.
Miles de aficionados al automovilismo ocuparán las cunetas de los cuatro kilómetros de recorrido montañoso en las inmediaciones de Sant Vicent, que hoy desde las nueve de la mañana retumbará por el rugir de los motores y desprenderá ese característico olor a goma quemada.
El piloto vasco de 67 años Andrés Vilariño es el claro favorito al triunfo final. A bordo de su renovada barqueta de 500 caballos, valorada en unos 180.000 euros, el veterano piloto buscará pulverizar el récord de la prueba, que él mismo estableció el año pasado (02.02.347), y bajar por primera vez de la barrera de los dos minutos.
En línea de salida habrá 53 participantes divididos entre los vehículos de la general para el Campeonato de Balears de montaña, los del tramo cronometrado, la regularidad 'súper sport' y la Copa Drifting de montaña.
Los entrenamientos comenzarán a partir de las 9 horas y la hora prevista para el inicio de la primera manga de carrera son las 11. Ayer, en Sant Jordi, tuvieron lugar las verificaciones técnicas y administrativas de los coches participantes.
