El Real Murcia deberá lidiar este mediodía con la presión de no haber ganado aún ante su afición en la Nueva Condomina. El conjunto que entrena Manolo Herrero suma tres empates consecutivos, dos de ellos en casa frente al Villanovense (0-0) y el Recreativo de Huelva (2-2), por lo que hoy tiene la necesidad de bridarle el primer triunfo a su afición.

El club, un histórico del fútbol español, rinde cuentas ante una masa de 10.500 abonados (diez veces más que la UD Ibiza) y su repercusión a nivel regional es muy importante. Ya lo dijo Herrero en la previa del partido: «Nosotros tenemos una presión distinta, tenemos un seguimiento brutal por parte de todo el mundo. El Ibiza en ese sentido es más tranquilo. Tendrá exigencia porque una persona ha puesto mucho dinero para estar arriba. Pero aquí ya no es eso, es mucho más, aparte de lo económico. Somos el Real Murcia».