El HC Eivissa ha cogido ritmo este final de temporada y ha empezado a tutear a los mejores equipos de la Primera Estatal masculina de balonmano. Los naranjas dejaron escapar ayer con vida al Maristas Algemesí en el último cuarto, después de mantenerse a flote en un partido en el que fueron casi siempre por detrás en el marcador.

De hecho, la única ventaja ibicenca fue el 0-1 que marcó Miguel López. Desde entonces siempre fueron los locales los que dominaron el luminoso y cerraron la primera parte con cuatro goles de ventaja (15-11).

Los pitiusos siempre mantuvieron la cara al partido gracias al acierto en ataque de Marc Torres y Miguel Ángel Olea, con ocho y seis goles, respectivamente. Tanto que igualaron el partido a cinco minutos del final (14-14).

Sin embargo, no pudieron culminar la remontada y el Maristas Algemesí, tercer clasificado de la fase regular, acabó imponiéndose en el pabellón 9 d'Octubre al HC Eivissa en un gran tramo final por 29 a 26.