Este Class Bàsquet Sant Antoni mete miedo a cualquiera

Las aguas bajan con calma en Sant Antoni. El Class y, sobre todo, David Barrio, ha dado con la tecla que le ha convertido en un equipo temible que parece no tener techo. Tras pasar un mes de noviembre aciego en el que no consiguió sumar ninguna victoria y encadenó cinco derrotas consecutivas en liga, los portmanyíns han sabido dar la vuelta a una situación muy complicada que le llegó a colocar en novena posición, fuera de los puestos del play-off de ascenso a Primera FEB. Desde la entidad se ha puesto toda la carne en el asador para conseguir el ascenso, como demuestra el aumento del 2.5% en los recursos económicos para armar un equipo de garantías que pueda luchar de tú a tú contra todos sus rivales.

Pero todo cambió en diciembre. Tras el oasis en el desierto, los ibicencos volvieron a la senda del triunfo ante Benicarló, y desde entonces, han conseguido nada más y nada menos que nueve victorias consecutivas, algo nunca visto en la historia del club. Ahora mismo, los pupilos de David Barrio ocupan la tercera posición con las mismas victorias que el segundo, Lliria, contra los que los insulares se medirán este fin de semana en un duelo de alto voltaje. Triunfos sufridos como los de Tarragona y Mataró donde el equipo demostró carácter y personalidad, igual que ante el líder, Palmer Basket, que aterrizó en la isla de Ibiza sin haber perdido un solo partido para hincar la rodilla por primera vez en una vibrante prórroga en Sa Pedrera que hizo crecer mucho en confianza y juego a los pitiusos.

La escuadra isleña tiene el foco puesto en conseguir la segunda plaza al término de la campaña, ya que la primera, en manos de Palmer Basket, parece innacesible viendo el nivel que están mostrando los mallorquines, que solo han perdido dos partidos en todo lo que llevamos de competición, ante Sant Antoni y en el derbi ante Fibwi Palma. Un ritmo excelso que los ibicencos podrían haber seguido de no ser por ese bache que el Class pasó en noviembre y que les dejó casi sin opciones de luchar por la primera plaza, que es la única que otorga el ascenso directo a la antesala de la ACB. Pero es muy importante el hecho de quedar segundo, ya que los sanantonienses tendrían el factor cancha en el hipotético play-off hasta la última ronda, con la ventaja que ello conlleva.

El próximo fin de semana los pitiusos tienen un partido clave en sus aspiraciones ante Lliria, el último verdugo de los de David Barrio el pasado 4 de diciembre en Sa Pedrera, donde los de Barrio fueron derrotados por 69-71. Será la tercera vez en la que se enfrenten ambos planteles esta temporada, ya que también se midieron el pasado 12 de noviembre en la quinta jornada de la Copa de España, con victoria para el Class por 93-74. El encuentro del sábado será a cara de perro entre ambos equipos, ya que una derrota sería despedirse de todas las opciones para poder disputar el liderato a Palmer Basket, que viajará hasta Benicarló para medirse al noveno clasificado. Este Sant Antoni está capacitado para ganarle a cualquiera.

Suscríbete para seguir leyendo