Adrián Guirado y María Cabello conquistan cuatro días después la Pujada a la Catedral de Ibiza

R.J. Palomo
La emblemática Pujada a la Catedral de Ibiza celebró su 42ª edición este sábado 4 de enero, tras ser aplazada debido a las lluvias que afectaron la isla el 31 de diciembre, fecha habitual de la carrera.
Este año, la prueba alcanzó una cifra histórica de inscritos y superó por primera vez los 1.000 participantes (1.181), se agotaron prácticamente los 1.200 dorsales disponibles, aunque han sido poco más de 600 los que finalmente han completado el recorrido este sábado el día previo a la Noche de Reyes.

Mira aquí todas las fotos de la Pujada a la catedral en Ibiza / J.A. Riera
En la exigente ascensión de poco más de dos kilómetros hasta Dalt Vila, Adrián Guirado, de la Peña Deportiva, se alzó con la victoria al cruzar la meta con un tiempo de 6 minutos y 43 segundos, superando por apenas un segundo a Mark Roper, del CA Pitiús. El tercer puesto fue para Rubén Torres, también del CA Pitiús, quien completó el duro trazado en 7 minutos y 2 segundos.
En la categoría femenina, la joven promesa María Cabello, del Club Atletisme Pitiús, se coronó campeona al completar el recorrido en 8 minutos y 37 segundos, y logró además el vigésimo cuarto mejor tiempo en la clasificación general absoluta. La segunda posición fue para Noelia Pérez Tur, del Hybiza Athletes, con un tiempo de 8:44, mientras que el podio lo completó la mallorquina Nuria Tauler, del club Sa Pobla, con una marca de 8:56.
Participación y ambiente festivo
A pesar de que el cambio de fecha de la carrera pudo haber influido ligeramente en la participación, el espíritu navideño y la alegría entre los corredores se mantuvieron intactos. De los más de 1.000 inscritos, alrededor de 600 atletas lograron completar el exigente recorrido que serpentea por las empinadas calles de Dalt Vila y que culmina en la majestuosa catedral de Eivissa. Como es tradición, muchos participantes acudieron disfrazados, aportando un toque de color y diversión al evento y consolidando la Pujada a la Catedral como una cita ineludible en el calendario festivo-deportivo de la isla.
El recorrido, de poco más de dos kilómetros, empieza en los muelles del puerto, en la plaza de es Martell, y asciende por las estrechas y adoquinadas calles de Dalt Vila, declaradas Patrimonio de la Humanidad, hasta llegar a la catedral. Este trayecto no solo pone a prueba la resistencia física de los corredores, sino que también ofrece una experiencia única al atravesar uno de los entornos más emblemáticos de Eivissa. Numeroso público esperaba a los corredores en la plaza de la catedral, donde los miembros de Addif les obsequiaron con zumos y frutas.
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