La eficacia del Nàstic acaba con la ilusión copera de la SD Ibiza

Los ibicencos, que dieron una buena imagen, se repusieron a pesar del inmerecido 0-2 con el que se fueron al descanso

Jesús Rodríguez

Jesús Rodríguez

Se acabó la ilusión copera. La SD Ibiza cayó eliminada por 1-2 en primera ronda de Copa del Rey ante el Nàstic de Tarragona en el encuentro disputado en el Estadio Sánchez y Vivancos, que presentó una gran entrada en este choque intersemanal. Los ibicencos hicieron varias rotaciones pensando en el derbi del próximo domingo frente a la Peña Deportiva en Santa Eulària, mientras que el cuadro catalán ejerció con su calidad de favorito y fraguó su triunfo gracias a la pólvora de los jugadores de arriba y un sublime gol de Jiménez, gracias a los que consiguieron el billete para la siguiente ronda, pero que terminó sufriendo ante un conjunto ibicenco que nunca se rindió y que a punto estuvo de conseguir el empate

Golpeó primero el cuadro catalán en el minuto 15 tras una falta botada por Álex López que encontró a Óscar Sanz en el segundo palo, quien no perdonaría en la definición ante Christian y pondría el 0-1 en el marcador. Los de Raúl Casañ se repusieron bien y tuvieron el empate en las botas de Riquelme dos minutos después, pero su disparo desde dentro del área fue rechazado por Rebollo, muy seguro durante todo el partido. El gol enfrió al público ibicenco, que vio a los tarraconenses encontrar el premio del gol en su primera llegada pese al buen inicio local.

En el 21, los catalanes anotaron el segundo tras una obra de arte de Álex Jiménez, el mejor jugador del partido, que robó el balón en el centro del campo, levantó la cabeza y, al ver adelantado a Christian, lanzó un disparo medido que se coló en la portería rojiblanca, desatando la euforia de la afición tarraconense, que no se creía lo que acababa de ver sobre el tapete del Sánchez y Vivancos. Jarro de agua fría para el equipo de Casañ, que inició bien el partido, pero que tenía una desventaja de dos goles. El técnico valenciano se vio obligado a sustituir a Christian, que se hizo daño en una acción y no pudo continuar el partido. Entró en su lugar Edu Frías.

Los rojillos, que no estaban siendo para nada inferiores a su rival, subieron líneas para intentar reducir distancias, pero el conjunto de Daniel Vidal defendía muy bien, con todos sus jugadores juntos, ordenados, siendo solidarios en las ayudas y lanzando contragolpes con mucha verticalidad gracias a la velocidad de sus hombres de arriba. A la media hora de partido, tuvo el tercero el Nàstic tras una gran jugada por banda izquierda de Nil, que intentó poner el balón en la escuadra de Frías, pero su lanzamiento cruzado no encontró portería. Sufría muchísimo la SD cada vez que el cuadro catalán pisaba su área.

El segundo gol templó el ánimo de los pitiusos, que dudaban entre atacar con todo o seguir con el plan de partido inicial, visto el daño que sufrian cada vez que el Nàstic llegaba a su portería. En el 39, Nofre intentó reducir distancias con un disparo desde el borde del área que salió a escasos centímetros de la portería de Rebollo. Los catalanes manejaron el tempo del partido, durmiéndolo a la espera del descanso, conscientes del botín que habían conseguido en los primeros 45 minutos. Por su parte, los insulares trataban de meter un gol para reducir distancias y meterse en el partido. Y así se llegó al ecuador de la contienda, con un 0-2 que no demostraba lo visto sobre el campo. El Nàstic demostró su calidad de categoría superior y sacó su pegada arriba ante un Ibiza que propuso y que jugó bien al fútbol, pero que no encontró el fruto del gol. En el descanso, el presidente de la entidad isleña, Vicente Marí, obsequió con dos camisetas a Rafael Triguero y Catiana Fuster.

El segundo acto comenzó con cambios en el cuadro isleño. Entraron al campo Bengoechea y Raúl Castro en detrimento de Nofre y José Ramón. Los ibicencos trataron de meter un gol que les espolease y metiese en el partido, pero los catalanes salían con una velocidad endiablada al contragolpe. En el 9, Cristian Cruz salvó bajo palos el tercer gol visitante tras una gran transición tarraconense que finalizó Nil desde la izquierda. Los de Casañ no supieron sostener los contragolpes visitantes en todo el partido, algo de lo que era consciente el cuadro catalán, que explotó la velocidad de sus delanteros cada vez que pudo. A los diez minutos del segundo acto, Casañ introdujo otro doble cambio. Salieron del campo Álex Sánchez y Lecea, a los que sustituyeron Navalón y Caturla. 

Los rojillos trataban de mover el balón para desarbolar la defensa visitante, pero el Nàstic demostró ser un equipo fiable y trabajado. Tenían las líneas muy juntas y defendían replegados sin dejar espacios, algo que complicó la labor del cuadro local, al que se le nublaban las ideas en la zona de tres cuartos de campo, sin encontrar un último pase que pudiese generar alguna clara ocasión. La intensidad fue menor en un segundo tiempo en el que el conjunto catalán supo bajar las pulsaciones el partido para no dar opciones a la reacción local. 

A punto estuvo de hacer el segundo en su cuenta particular Álex Jiménez tras una falta lanzada desde el costado izquierdo de manera magistral, pero el balón salió rozando el poste de la portería defendida por Edu Frías. Los cambios no hicieron mella en un Ibiza que no inquietó a Rebollo en la segunda mitad y que veía como se esfumaban sus opciones de pasar de ronda ante un conjunto que en la segunda parte estuvo muy cómodo sobre el terreno de juego. 

La SD se fue con todo a falta de un cuarto de hora para el final, y los catalanes tuvieron opciones de meter el tercero a la contra en un partido que estaba roto. Jaume Villar probó suerte desde el borde del área, pero Rebollo mandó el balón a córner. 

La SD Ibiza se fue con todo en el último cuarto de hora con más corazón que cabeza, y encontró el premio del gol en el 88 gracias a una gran jugada por banda derecha de , que mandó un balón al área para que Bengoechea mandase el balón al fondo de las mallas y metiese en el partido a los isleños, que terminaron el partido volcados en búsqueda del empate. Pero los tarraconenses, que vieron como expulsaban a Vermella en el descuento tras una terrible entrada, supieron sufrir y se llevaron una victoria que les permite seguir con la ilusión de la Copa del Rey intacta. La SD Ibiza remó para morir en la orilla.

Casañ: «Hemos merecido mucho más»

El entrenador de la SD Ibiza, Raúl Casañ, valoró el partido de su equipo, que «compitió a un nivel muy alto ante un rival tan exigente como es el Nàstic de Tarragona, que a nivel defensivo es un equipo muy potente», y declaró que «los pequeños detalles de los dos goles mermaron al equipo», y confesó que remontar «un 0-2 ante un rival así es muy difícil», y que al descanso los tarraconenses «se llevaron un premio muy grande con lo visto en la primera mitad». «Ellos han aprovechado sus ocasiones, pero el equipo ha tenido un nivel de juego muy alto frente a un adversario de Primera RFEF», manifestó el técnico valenciano, que consideró que su equipo ha «merecido mucho más debido al nivel tan alto que han mostrado los jugadores», pero que les ha «faltado un poco más de punch». «La valoración es muy positiva porque plantarle la cara al Nàstic de Tarragona con los jugadores que tiene es para felicitar al equipo», sentenció Casañ, que desde esta mima noche está ya «pensando en el partido del domingo».

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