El tirador ibicenco Carlos Costa Vich ha vuelto a demostrar que sigue conservando el pulso y que continúa siendo otra temporada más el auténtico número uno dentro del tiro de precisión en el territorio español. El veterano deportista de Ibiza conquistó durante este último fin de semana su enésima corona de mejor tirador nacional, tras dar toda una clase magistral en el Campeonato de España en las modalidades de Varmint Ligero y Pesado a las distancias de 100 y 200 metros, que se celebró en el campo de tiro de Naquera, en Valencia.
Además de la sobresaliente tarjeta de premios de Carlos Costa (medalla de oro como campeón absoluto y oro en Varmint Ligero a 100 metros, así como otros muchos reconocimientos), en las instalaciones del centro de tiro valenciano brilló con fuerza el también tirador ibicenco Antonio Marí ‘Mayans’, que se sumó a la fiesta de triunfos nacionales para Ibiza con una excelente actuación particular, con la que redondeó el cuantioso botín cosechado por ambos representantes del Club de Tiro Olímpico de Ibiza, al añadir una medalla de Oro en Varmint Pesado a 200 metros y un Diploma a la mejor agrupación de tiros en dicha categoría.
«Es una lástima que no haya algún tirador más de la isla, porque los hay muy buenos, que se anime. Y así podríamos formar equipo», explica Carlos Costa a Diario de Ibiza tras su espectacular paso por el Campeonato de España, antes de detallar sobre el desarrollo de la prueba: «Como siempre, estuvo muy reñida. Especialmente entre nosotros los ibicencos. Y destacaría el calor dentro del local porque estábamos a 31 grados, lo que produjo que al mediodía, debido a la reflectividad del terreno en el campo de tiro, hubiera unas horas que no se podían distinguir las dianas correctamente, además de que parecía que se movían y cambiaban de forma».
Como nos tienen acostumbrados hace años, los dos tiradores ibicencos no defraudaron en la lucha por los primeros puestos y consiguieron anotarse ambos unos más que notables resultados.
En esta modalidad de tiro, el objetivo es intentar sacar el máximo rendimiento al binomio carabina/ cartucho. Y para ello deben recargar sus propias balas para intentar optimizarlas lo máximo posible.
«Antes se permitía recargar en el mismo campo de tiro y se iba variando la dosis y el modelo de puntas según iba cambiando a lo largo del día la meteorología, especialmente en el porcentaje de humedad y en la temperatura», aclara Carlos Costa, que también matiza al respecto en el plano técnico: «Ahora, al haberse prohibido, solo podemos recargar en casa. Y entonces es una lotería porque te pasas dos semanas para intentar hacer 200 balas idóneas para el lugar de la competición y resulta que, luego, el tiempo está todo al revés de lo previsto».
