La UD Ibiza-Ushuaïa Volley ya es matemáticamente equipo de la Superliga-2. El conjunto ibicenco no ha sido capaz de ganar en casa al colista de la clasificación, el San Sadurniño, que se ha impuesto en el pabellón de Es Viver por un tanteo final de 1-3. Con ese duro varapalo las opciones de soñar con un milagro que les permitiese alcanzar la permanencia acabaron por dilapidarse, al quedarse el cuadro local ya sin opción alguna a falta de una jornada para cerrar la fase regular de competición de la Superliga Masculina, la máxima categoría del voleibol español, en la que la escuadra isleña llevaba de forma ininterrumpida desde la temporada 2012/2013.
La UD Ibiza-Ushuaïa Volley llegaba al encuentro de esta penúltima jornada con muchas urgencias y tras una campaña muy frustrante, en la que el equipo pitiuso no ha logrado en ningún momento dar muestras de poder llegar a competir al nivel esperado en una división tan exigente como la Superliga Masculina, en una temporada con hasta tres entrenadores en su banquillo y en la que únicamente ha conseguido ganar tres partidos, sin lograr puntuar en ninguno más.
Una triste y trágica despedida
La situación era complicada este sábado para los de Raúl Rocha y todo apuntaba a un final de lo más trágico para los ibicencos, dado que necesitaban sumar los seis últimos puntos de forma consecutiva y esperar además que el Arenal Emevé de Lugo no sumase en ninguno de sus dos partidos.
Nada se dio tal y como era deseable, ni hubo carambola para llegar a la última jornada con alguna ilusión, ya que los gallegos sumaron un punto en su derbi regional contra el Rotogal Boiro, y la UD Ibiza-Ushuaïa Volley claudicó ante el San Sadurniño. Una UD Ibiza-Ushuaïa Volley que abandona la máxima categoría tras un año para olvidar en lo deportivo.
