Diario de Ibiza

Diario de Ibiza

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Fútbol - Segunda

La UD Ibiza resucita en Can Misses

Germán, decisivo al detener un penalti al Fuelabrada con 2-1 en el minuto 70

71

Todas las imágenes del partido UD Ibiza - Fuenlabrada Vicent Marí

La crisis parece cosa del pasado. La UD Ibiza asestó ayer un puñetazo sobre la mesa y se reivindicó en Segunda División con un triunfo de mucho prestigio sobre el Fuenlabrada que permite a los ibicencos tomar oxígeno y escapar de los puestos de peligro en LaLiga SmartBank (3-1).

Los de Juan Carlos Carcedo, reforzados anímicamente tras el empate en Pucela, se reencontraron con la victoria cinco jornadas después y lo hicieron ante su público y endosando tres goles al hasta ayer equipo menos batido de la categoría.

Javi Lara, Goldar y Nono consiguieron los tantos del triunfo celeste, mucho más efectivo que en jornadas anteriores, pero el guardameta Germán Parreño fue uno de los grandes protagonistas del partido al detener un penalti a Pedro León que habría supuesto el 2-2 a los 70 minutos de partido.

La UD Ibiza avisó pronto de sus intenciones con una gran acción colectiva por el costado de Javi Lara y la posterior jugada de estrategia, que permitió un remate forzado de Castel por encima del travesaño.

Los isleños insistieron, ahora por banda derecha, y hallaron premio después de un mano a mano desempeñado por el delantero vasco. El cordobés recibió el rechace del disparo al poste de Castel y, tras acomodarse el esférico, fintado a su rival, anotó el 1-0 por la escuadra con precisión de cirujano (min. 7). El centrocampista de 35 años sacó pecho con un golazo de preciosa factura y abrió el candado de un Fuenlabrada que presumía de ser el menos batido de Segunda División con solo 7 tantos en contra.

El conjunto del sur de Madrid tardó en reaccionar y sólo contabilizó un remate de cabeza muy desviado de Soldano y un tímido disparo a las manos de Germán por parte de Anderson.

Javi Lara se reivindicó ayer con un gran partido. | V.M.

Los de Carcedo no estaban dispuestos a seguir ampliando su hemorragia de goles, así que mejoraron su actitud defensiva con las líneas más juntas y un mayor rigor táctico. En esta labor destacaron Appin y Bogusz, muy presentes tanto en labores defensivas como ofensivas. Pasada la media hora de juego, el francés filtró un excelente pase al espacio para Castel que acabó con otra definición al poste, aunque la acción fue invalidada por fuera de juego.

El ‘Fuenla’ no volvió a acercarse a los dominios de Germán hasta el minuto 35, con un testarazo de Soldano que atajó sin problemas el cancerbero ilicitano. Y a pesar del mayor empuje de los celestes, la ocasión resultó el preámbulo del empate, conseguido por Anderson tras ganar la espalda de Rubén y superar por alto la salida de Germán con una efectiva vaselina (1-1, min. 39). Un despiste en la marca tras el pase en profundidad de Cristóbal condenó de nuevo a los de Carcedo, que hasta ese momento habían exhibido una gran disciplina en tareas defensivas.

El propio Anderson estuvo a punto de poner el 1-2 antes del descanso tras remachar en el segundo palo una excelente asistencia de Arturo, que había encontrado una autopista por el carril diestro. El remate a bocajarro se marchó a la derecha de Germán pero dejó el susto en el cuerpo a un Ibiza que comenzaba a dar síntomas de nerviosismo, y que tampoco encontraba fisuras en la sólida zaga de los pupilos de José Luis Oltra.

Tras el descanso, otro arreón

El descansó serenó al cuadro isleño y la segunda parte arrancó con otro aroma. Morillas y Lara explotaron su conexión por la izquierda y dos centros precisos al área pudieron terminar de cualquier manera debido a su peligrosa intención. Los celestes metieron atrás a su rival y acabaron por derribarlo. Primero fue Rubén el que probó los reflejos de Altube tras otra maravillosa asistencia del cordobés, y la segunda jugada ganada por los ibicencos acabó con un cabezazo en área pequeña de Goldar que subió con cierto suspense al marcador (min. 58). El gallego remató un centro de Fran Grima que fue despejado por un adversario cuando el balón ya había superado la línea de gol. El equipo celebró con rabia el tanto que volvía a ponerlos por delante. Y Can Misses con él.

El Fuenla salió de la cueva y dejó desguarnecida la retaguardia, por donde se filtró Bogusz para intentar una vaselina sobre Altube que se marchó desviada.

Penalti innecesario y paradón

El peligro pasó de un área a la contraria en cuestión de segundos por otro error infantil del Ibiza en defensa, cometido ahora por un Kevin Appin que además tuvo que marcharse lesionado. El francés hizo una tijereta innecesaria para despejar un balón sobre la frontal del área y, a juicio del colegiado, cometió penalti por juego peligroso sobre Dago.

Los pitiusos parecían empeñados en sabotear su victoria, pero entonces emergió la a veces cuestionada figura de Germán Parreño para salvar a los suyos. El alicantino adivinó la intención de Pedro León y se lanzó con determinación a la derecha, despejando a córner el potente lanzamiento del exmadridista desde los 11 metros (min. 70). La parada se celebró como si de un gol a favor se tratase. No era para menos.

Los ibicencos tomaron oxígeno, Carcedo movió el banquillo y el partido volvió a jugarse en el campo del cuadro madrileño, incapaz de remontar las adversidades y sometido por un Ibiza que sentenció en el 90’ a través de Nono tras embocar una gran asistencia de Ekain al contragolpe.

La UD Ibiza recuperó su identidad en Can Misses y volvió a sumar un triunfo cinco jornadas después que le aúpa a la zona tranquila de la clasificación. Los hombres de Carcedo tendrán ahora nueve días por delante antes de volver a jugar, el próximo lunes 1 de noviembre, en Alcorcón (16 horas).

Compartir el artículo

stats