Dice que no sabe si los viejos roqueros nunca mueren, pero sí que no se retiran. El rey del rock español, Miguel Ríos (Granada, 1944), lo intentó hace 10 años, pero este 2021 volvió con un nuevo disco, 'Un largo tiempo', y más conciertos. Como el que ofreció en julio en el Festival Jardins de Pedralbes, en el que demostró estar en forma. Mientras, todos estos años ha actuado para causas solidarias, con las que devolver a la sociedad todo lo que le debe. La última, su participación en el disco de 'La Marató' con su emocionante 'Himno a la Alegría' en su versión al catalán, para la que tuvo que domar su acento granadino.

Un lujo tener a Miguel Ríos en el disco de 'La Marató'. Cuando se lo propusieron, ¿aceptó sin dudarlo?

Sí, sí. Es que ya me extrañaba que yo no saliera... Pensaba: ¿qué pasa? (ríe) Cuando me propusieron hacer ‘Himno a la Alegría’, pensé: a lo mejor tiene una traducción buena, en la que no se pierda el espíritu de la canción. Y cuando la oí, me pareció maravillosa. Sobre todo porque cambiar “los hombres volverán a ser hermanos” por “a ser un sol batec” es precioso. Un solo latido de corazón. Me gustó mucho. Me pareció que era una novedad. Y luego imitar el acento... Incluso me mandaron una 'demo' cantada por un tío para decir “els 'homas'” y todo eso. Porque mi acento era granadino (ríe).

Dice que ya había cantando antes en esta lengua.

Sí, pero hará muchos años. Porque llevo muchos. Este mes hace 60 que entré en un estudio para grabar un disco. Y aquello era una cosa más comercial. La Nova Cançó estaba despuntando, las canciones eran más de cantautor, y dijeron: "Vamos a abrir un mercado en Cataluña". Me lo propusieron y me gustó. Lo que pasa es que lo entendí menos. Ahora sé más de qué va la cosa. 

Y entiende que en Cataluña se proteja el catalán. En la presentación del disco, comentó que había comprendido el 95% de lo que se dijo en esa lengua. Eso es mucho.

Cataluña está consiguiendo conservar el catalán, primero, porque la gente tiene el deseo de expresarse en su lengua materna, y eso me parece de puta madre, pero luego también está traspasando a otros medios. Porque en los 'telediarios' del resto de la nación oímos hablar en catalán y traducen debajo. Y eso le hace un bien increíble a la psique del ser humano, ya que eso nos permite esforzarnos en entender lo que están diciendo.   

La canción tenía que ser ‘Himno a la Alegría’, que lleva' años siendo eso, un himno. Y emocionando.

Esta canción ampara todo lo que quiere 'La Marató'. Es una putada que tengamos que seguir pidiendo a la gente que colabore, cuando tendría que ser la Seguridad Social la que se hiciera cargo de todo…. Pero mientras no llega, encantado de contribuir.

Este año 'La Marató' se centra en las enfermedades mentales. Estaba previsto antes de la pandemia, pero con esta ha habido un repunte, sobre todo entre los jóvenes, y aún lo justifica más.

Y ahora hay menos reparo en confesar que no se está bien. Como cuando te duele una pierna o un riñón. Y admitir que eso no te hace menos humano, sino que te humaniza. Lo que pasa es que ese mensaje no estaba entendido por la sociedad. Y es esta la que como, desgraciadamente, hay tanta gente afectada, se está dando cuenta de que hay que hacer una llamada general y prestar más atención a ese tipo de cosas. 

Cada vez más cantantes, como Dani Martín, Camilo y varios ‘extriunfitos’, cuentan que han ido a terapia. Ese mensaje es muy importante. 

Es que quien no ha ido a terapia no es nadie… (ríe) No, ten en cuenta que somos una profesión de muy alto riesgo. Estamos muy arriba y abajo todo el tiempo. Dependemos mucho de lo que recibimos de fuera. O tienes una cabeza amuebladísima, o si no, necesitas ayuda. Porque tienes que entender por qué un disco no funciona, cuando el anterior fue un éxito acojonante. Todo ese tipo de cosas. Y los músicos, los artistas, somos, por lo general, gente tan insegura…Yo llevo mucho tiempo asistiéndome de esa ayuda, y me parece que es un dinero muy bien gastado.

Participa en la edición del 30º aniversario. Nada menos que 30 años de solidaridad. ¿Qué le parece? 

Cuando Àngel Lacalle, el director del disco, me invitó a hacerlo, me dijeron todo lo que se estaba moviendo desde hace tanto tiempo. Es maravilloso. Y también es muy importante que nuestros mecenas, es decir, la gente que nos compra los discos y las entradas, vean que devolvemos lo que nos dan. Que no eres solo una máquina registradora.

Desde que hace 10 años anunció que se retiraba, ha participado en muchas causa solidarias. Como el emocionante vídeo para ayudar a los músicos durante el confinamiento.

Sí. Voy siempre que me llaman. El día 13 canto en Ávila, en un concierto para los damnificados del incendio de este verano. Siempre que puedo me apetece ser altruista. Aunque ahí vamos a cantar por dinero, porque hay mucha gente que vive de esto: el equipo que montamos para hacer un bolo.

Es que tras un bolo hay una empresa.

Exacto. Pero cuando te llega la oportunidad de hacerlo sin cobrar…. Como dice Fito Páez: “Yo vengo a ofrecer mi corazón". En esa canción absolutamente maravillosa que se titula así. “Dicen que todo está perdido/ yo vengo a ofrecer mi corazón”. Esa la podríamos meter el año que viene. Creo que en catalán quedaría muy bien. “Na na na.. el meu cor”. ¿Cómo sería?

Algo así como: “Vinc a oferir el meu cor”.

(Canta) “Vinc a oferir el meu cor”. Es una especie de chacarera. Tiene que estar en el próximo disco de 'La Marató', sí.

Dijo que se retiraba, pero ha vuelto. O sea, que es cierto eso de que los viejos roqueros nunca mueren.

(Ríe) No sé si mueren, pero retirarse, no. Soy como el Cid Campeador del rock. El día 27 tocamos en el Tarraco Arena de Tarragona, un concierto como el que dimos en julio en el Festival Jardins de Pedralbes de Barcelona. Por cierto, me gustó mucho la crítica que de él hizo Jordi Bianciotto en El Periódico [Diario del mismo grupo de comunicación que este medio]. Y el título, 'Miguel Ríos: acústico, pero electrizante' , me encantó.