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El juicio que se decidió en un duelo

Eric Jager reconstruye la disputa entre dos caballeros que originó la celebración del último juicio por combate en el París del Medievo

El úlbimo duelo

El úlbimo duelo Eric Jager

El último duelo

Eric Jager

Editorial Ático de los libros

Precio. 21,90 €

La Edad Media siempre ha ejercido una enorme fascinación en el imaginario colectivo. Los ideales de caballería o del amor cortés han dejado tanta huella en nuestra cultura como las continuas guerras, masacres, pestes o hambrunas que caracterizaron estos turbulentos siglos de la historia europea. Los combates entre caballeros como método para resolver jurídicamente disputas y afrentas de honor constituyen una de las imágenes más icónicas del Medievo, aunque fueron cayendo con el tiempo en desuso, y es precisamente uno de estos postreros enfrentamientos, sucedido en la Francia de finales del siglo XIV, el que constituye la base de «El último duelo», una espléndida recreación histórica a cargo del especialista literario Eric Jager que ahora llega al lector español de la mano de Ático de los Libros.

La historia es bastante conocida en el país galo, pero no ha dejado de suscitar controversias a través de distintas épocas, ya que la verdad sobre los hechos que dieron lugar al duelo a muerte entre el caballero Jean de Carrouges y el escudero Jacques Le Gris el 29 de diciembre de 1386 en París, con el rey Carlos VI, toda su corte y cientos de curiosos como testigos, siguen sin estar nada claros. Los textos de la época recogen que Carrogues y Gris eran grandes amigos, vasallos del conde Pedro de Alencon, en Normandía, pero las rencillas y envidias en torno a los favores de su patrón y la disputa por diversas tierras agriaron irremediablemente la relación, que se tornó en odio.

Finalmente, todo estalló en enero de 1386, cuando Carrouges regresó de una campaña bélica en Escocia (en plena Guerra de los Cien Años) y fue informado por su esposa Marguerite de que había sido violada por Le Gris en el castillo de Campomesnil, algo que el acusado negó tajantemente. El caballero llevó el caso al Parlamento de París para solicitar un «Juicio de Dios», y su deseo le fue concedido, pese a que esta práctica era ya por entonces muy poco frecuente. Ambos contendientes lucharían a muerte y la suerte del combate decidiría quién decía la verdad. La salvedad es que si vencía Le Gris, también Marguerite sería ejecutada por entenderse que lo había acusado falsamente.

Si no conocen el desenlace, o aunque lo sepan, lean el libro de Eric Jager, un ensayo escrito al ritmo de una novela que retrata con milimétrico detalle, a partir de documentos originales, la Francia feudal: el funcionamiento de la Justicia, el recurso a la tortura y el horrible destino de los condenados, la estrategia de la guerra, el papel de los matrimonios como instrumento de ascenso social, el poder del rey o la desparecida distribución del París medieval.

Destaca sobremanera la descripción de los preparativos del duelo y toda su ceremonia, que permiten el lector asombrarse con la complejidad de las armaduras y el armamento de los duelistas. Por cierto, que ya ha de camino una adaptación al cine a cargo de Ridley Scott.

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