El 37 por ciento de tortugas marinas rescatadas en Balears en el año 2020 estaban enmalladas por plásticos o redes, el problema más grande que tienen que gestionar en la actualidad los Centros de recuperación de fauna marina.

Según informó ayer en nota de prensa la conselleria de Medio Ambiente y Territorio, durante 2020 se han registrado 84 casos de varamientos de tortuga marina adulta. De estos, al menos 31 han sido provocados por enmallamientos con plásticos y redes.

En este sentido, el Cofib quiso alertar que los efectos de los plásticos y los restos de redes en las especies marinas son actualmente el problema más grande que tienen que gestionar los Centros de recuperación de fauna marina.

Asimismo, el Servicio de protección de especies recordó que, si se halla una tortuga marina enmallada, hay que llamar de manera inmediata al 112, que pondrá en marcha el protocolo de actuación. Es importante que no se intente desenmallar el ejemplar, puesto que puede causarle más daños.

Nueva liberación

Por otra parte, la conselleria comunicó que personal del Consorcio de Recuperación de Fauna de Balears (Cofib) ha liberado, esta semana, un ejemplar de tortuga marina (Caretta caretta) en la playa de ses Covetes, en el Parque Natural de es Trenc-Salobrar de Campos.

El quelonio, bautizado como Nuria, fue hallado por unos navegantes en Cala Figuera (Santanyí) el pasado 14 de noviembre. Tenía la aleta derecha enmallada con plásticos, totalmente podrida y con exposición de huesos.

Inmediatamente, se activó el protocolo y el ejemplar fue trasladado a las instalaciones de Palma Aquarium donde se le retiró el enmallamiento y se le aplicó tratamiento antibiótico. Con todo, al cabo de tres días, se le tuvo que amputar la aleta en el Hospital Veterinari Aragó.