La actriz Ángela Molina (Madrid, 1955) ha ensalzado este sábado "la valentía" de quienes mantienen iniciativas como el Evolution International Film Festival de Mallorca a pesar de la pandemia de coronavirus, porque, ha defendido, "la cultura es un estandarte de libertad".

Molina ha mantenido este sábado un encuentro con los medios de comunicación en Palma en el que ha hablado de su última película, 'Lalla Aïcha', dirigida por el marroquí Mohamed el Badoui y que se estrena este sábado en el festival.

La intérprete ha elogiado el impulso de los organizadores del festival mallorquín en circunstancias difíciles como la crisis sanitaria vigente. "Entiendo la cautela, pero adoro la valentía", ha subrayado.

La actriz de 'Ese oscuro objeto del deseo' (1977) de Luis Buñuel ha explicado que antes de comenzar a trabajar en su última película tenía dudas de si podría encarnar el papel de una madre bereber y ha confesado que, cuando "estaba en Ibiza tratando de decidir si lo iba a hacer o no", se encontró a una mujer en la playa de ascendencia bereber a la que le preguntó si ella encajaba en el papel. La mujer le contestó que "absolutamente".

A pesar de haber necesitado un "coach" para que la ayudara con la lengua bereber, ahora siente como si se "uniera a la cultura" de ese pueblo y ha asegurado que durante su estancia en Marruecos para rodar, todo lo que pasaba a su alrededor era "mágico".

Molina rodó en 1983 la película 'Bearn o La casa de muñecas' en Mallorca, dirigida por Jaime Chavarri, una cinta basada en la novela homónima de Llorenç Villalonga que "refleja la cultura de la isla", ha destacado. Ese rodaje fue una experiencia que recuerda con afecto, porque le proporcionó un "encuentro con la historia".

La actriz, a pesar de que a consecuencia de la covid-19 hay "un porcentaje importante de proyectos parados", ni tiene "sensación de peligro" cuando tiene que trabajar. "Hay un control absoluto sobre la salud", ha enfatizado.