2.428 años después de que Aristófanes escribiera 'Lisístrata' y la presentara en Atenas, Miguel Navarro, director y fundador del grupo de teatro griego Komos, creó su propia versión de la obra clásica con una transexual con acento gitano en el papel de la protagonista. (Ver galería de imágenes)

La obra, que acumula tres años en cartel, forma parte de Parodos, el Festival Juvenil Europeo de Teatro Grecolatino de Balears, que este año celebra su vigésimo tercera edición y que Can Ventosa acoge entre ayer y hoy. Un total de 1.140 alumnos de 14 centros educativos de la isla asistirán a la representación de 'Antígona' y 'Lisístrata, una tragedia y una comedia, respectivamente.

«Durante el curso preparamos en clase las obras que se van a representar en el festival. Hacemos una lectura previa, luego venimos a la representación y, a lo largo de la semana, les haré un control para comprobar lo que han aprendido», comentó Antonia Roselló, coordinadora en Ibiza del grupo Parodos y profesora del instituto Xarc, en Santa Eulària. «La representación trágica les gusta, pero siempre lo pasan mejor con la comedia», continuó Roselló, que ha visto cómo la asistencia al festival «ha ido creciendo mucho durante los últimos años».

En el interior de la sala, los alumnos esperaban con impaciencia la llegada de los actores que, vestidos al más puro estilo griego, fueron entrando en el recinto flirteando con el público antes de subir al escenario. Un joven con túnica roja, acento gitano, desparpajo y un vocabulario bastante vulgar encarnó el papel protagonista e hizo reír sin parar a los alumnos. El tema principal de la obra, una huelga sexual llevada a cabo por las mujeres para terminar con la guerra entre espartanos y atenienses, le sirvió de gancho al director para atraer la atención de los jóvenes, que disfrutaron a carcajada limpia de todos los comentarios soeces que lanzaban los actores.

«Ahora sí que me habéis tocado el coño», «yo lo único que quiero es follar, follar y follar», «ser o no ser, paja o no paja, esa es la cuestión», o «soy el pelocho, el que se ha quedado sin chocho», son un ejemplo de algunos de los diálogos modificados o «actualizados», para «llegar a los más jóvenes», como comentó el director.

El resultado, no hay duda. Los alumnos disfrutaron de lo lindo y no se perdieron un detalle de la versión moderna de 'Lisístrata', pero lo que está aún por descubrir es si realmente captaron el mensaje de que es «más interesante el amor que la guerra», y que «hay que cambiar el mundo», que Navarro quiso transmitir.