Utilizar la danza para expresar emociones es el proyecto que han desarrollado durante todo el año los niños de Infantil y de quinto de Primaria del CEIP Sa Joveria.
La importancia del cuerpo, de conocerlo y de cuidarlo es el trasfondo de este proyecto impulsado por la profesora de educación física Vicki Corrales y por la asesora del Centro de Formación de Profesorado, Viqui Alemany.
El proyecto llevaba tiempo rondando en la cabeza de la profesora de los pequeños, tanto que el curso pasado Viqui Alemany ya organizó sus primeras sesiones de danza en este colegio. Con más tiempo y tras la incipiente experiencia, durante este curso, 23 niños de cuatro años y 10 niños de quinto de Primaria presentaron ayer en el Club Diario de Ibiza la evolución de su trabajo durante todo curso.
Los más pequeños demostraron sus avances en expresión corporal, mientras que los mayores, de 10 años, leyeron algunos poemas escritos durante el trabajo realizado en estas clases de danza.
Vicki Corrales destaca la actitud de los niños ya que se han expuesto ante un escenario desconocido. «Algunos son tan tímidos que ni siquiera intervienen en conversaciones, mientras que ayer se atrevieron a danzar solos delante de sus compañeros y de numerosas familias», explica Corrales.
El proyecto ha conseguido que todos los niños estuvieran pendientes unos de otros, que se autorregularan y que se ayudaran a la hora de bailar.
Entre los objetivos del proyecto destacan conocer el propio cuerpo en relación con el espacio y con los otros, reconocer las emociones propias y ajenas, mejorar la atención o practicar mindfulness. La dos expertas se sienten satisfechas porque «el proyecto ha servido para fomentar la inclusión entre todos los niños».
