La Semana Santa comenzó en Formentera con la procesión del pasado Jueves Santo, que organiza la Cofradía de Nuestro Señor Jesús Nazareno (la única existente en la isla), con la imagen de Jesús de Nazaret que se guarda en la parroquia de Sant Ferran. Durante la eucaristía previa, llovía en el exterior del templo, lo que no dejaba de preocupar a los miembros de la hermandad religiosa que por un momento pensaron en suspender el acto. (Mira aquí todas las imágenes del Vía Crucis)

Pero al llegar el final de la misa el cielo se despejó y los cofrades, vestidos con túnica morada con cinturón de oro, acompañados por la mujeres penitentes que iban con túnica color marfil, y los miembros de la recompuesta banda de cornetas y tambores salieron a procesionar la imagen por las calles de Sant Ferran.

El solemne recorrido fue seguido por los feligreses y algún turista despistado, mientras que en la comitiva, además de los miembros de la cofradía, también hubo representantes de todos los partidos políticos locales, que no perdieron la oportunidad de hacerse visibles. La procesión se prolongó durante más de hora y media y recorrió las calles interiores peatonales del pueblo.

Vía crucis

Ayer la lluvia volvió a la hora de iniciarse el vía crucis de Sant Francesc Xavier, de forma débil pero continua. La situación no impidió a los miembros que participan en la representación del Calvario de Jesucristo dramatizar cada uno de los pasos, tal y como estaba previsto.

Cada Semana Santa, los vecinos que se implican en esta escenificación se meten más en el papel, ya que después de varios años también han ganado en seguridad, especialmente Adán Ferrer Ribas, que representa a Jesucristo. Este colectivo está formado por más de 40 personas que ensayan durante varias semanas antes y participan activamente en la celebraciones religiosas programadas.

A pesar de la lluvia, el vía crucis fue seguido por numeroso público en todo su recorrido pero especialmente el final cuando se representa la crucifixión.