Irene de Andrés (Ibiza, 1986) estaba investigando sobre el inicio del turismo de masas y el concepto de vacaciones pagadas cuando se encontró de bruces con Prora. La historia de este enorme complejo turístico levantado por el régimen nazi en la isla alemana de Rügen le atrapó de tal forma que decidió contarla.
La artista visual ganó con este proyecto de investigación la V Beca de producción a la creación videográfica DKV-Es Baluard 2018 y a finales de junio se puso manos a la obra. Se desplazó a la la isla alemana acompañada de Javi Álvarez, que fue el cámara y también el responsable de la banda sonora del proyecto videográfico, bautizado como 'Prora. Complejos de destino'.
Irene de Andrés presenta hoy a las 13 horas «un avance» de este trabajo en el Observari, ubicado en Es Baluard, el Museo de Arte Moderno y Contemporáneo de Palma. Durante el evento los asistentes podrán ver la primera pieza de lo que en un futuro próximo será un documental sobre Prora. Se trata de un vídeo, de siete minutos y medio de duración, que «es una mezcla de tráiler y videoclip» y que invita al espectador a hacer un recorrido en el tiempo por este complejo turístico de cuatro kilómetros de extensión con vistas al Báltico. La proyección, adelanta la creadora, se acompañará también con documentación.
Prora fue levantado en 1936 por el régimen nazi. La artista ibicenca explica que el proyecto turístico formaba parte del programa 'Fuerza a través de la alegría' ideado para que 20.000 trabajadores alemanes disfrutaran de unas vacaciones asequibles.
Un proyecto paralizado
El estallido de la Segunda Guerra Mundial en 1939 impidió su inauguración, prevista para el año siguiente. Las obras estaban prácticamente terminadas, sólo faltaba el hall principal. Durante un tiempo la construcción, ubicada en una zona que pasó a formar parte de la República Democrática Alemana, dio alojamiento ocasional a militares. Tras la caída del muro de Berlín, el complejo turístico quedó totalmente abandonado.
En los últimos años, sin embargo, este resort ha vuelto a resucitar y se anuncia como un idílico destino de vacaciones con establecimientos de lujo.
La autora de 'Prora. Complejos de destino' explica que recientemente el complejo turístico fue «vendido por trozos a distintos inversores» y que ya hay varios hoteles, además de dos centros de documentación sobre la historia del lugar y un albergue juvenil, que conserva la estructura arquitectónica original del inmueble,al estar éste protegido.
En el vídeo que presentará hoy Irene de Andrés se puede apreciar la evolución de esta «enorme mole de cemento de arquitectura racionalista», rodeada de frondosa vegetación. La cámara de Javi Álvarez retrata en planos que se repiten tanto los espacios abandonados del resort como los que se han remodelado para acoger hoteles y apartamentos. Las imágenes se acompañan con citas que contextualizan este trabajo, como la de Manfred Hartwig, ejecutivo de Prora Solitarie, en la que afirma que «el pasado nazi no cuenta» y destaca como atracción principal del resort «su cercanía al mar».
Irene de Andrés explica que durante la grabación en Prora, que se prolongó seis días, todo el mundo colaboró y les abrió sus puertas para que grabaran. «Es un proyecto hecho con pocos medios, pero con muchas ganas», resalta la creadora, que anuncia que el año que viene estará listo el documental completo.
La muestra se podrá visitar en Es Baluard hasta el 20 de enero de 2019.
