Las compañías aéreas son empresas que, como tales, deben buscar la manera de optimizar recursos para obtener los máximos beneficios. Esto está bien, siempre y cuando no engañen a la gente. Me explico: compro un billete para volar a las 7.30 horas. Nada más llegar al aeropuerto, veo en las pantallas que lo han retrasado a las 10 horas. ¡Qué casualidad! ¡Hay un vuelo al mismo destino con la misma compañía a las 9.55 horas! ¿Casualidad o causalidad?
Como a mí las casualidades me han parecido siempre un concepto dudoso, trato siempre de buscar las causalidades. Llámame mal pensada pero... Será que si cancelan un vuelo nos tienen que indemnizar con 250 euros y si se retrasa menos de tres horas no? Pues bien, os explico la jugada:
1. Iberia 'retrasa'el vuelo 2,5 horas, así no hay derecho a indemnización (para indemnización debe haber un retraso de al menos tres horas).
2. Por la puerta de embarque 3 suben al avión los pasajeros del vuelo 8105 (salida 9.55 h).
3. Por la puerta de embarque 5 suben al avión los pasajeros del vuelo 8101 (salida 7.30 h).
4. De repente nos encontramos todos los pasajeros en el mismo avión. Entonces... ¿Por qué no hemos embarcado por la misma puerta de embarque?
Muy fácil: cancelan un vuelo que no va lleno, juntándolo con el siguiente, pero no dicen que es una cancelación para no tener que indemnizar y como el retraso es de menos de tres horas, tampoco hay indemnización por retraso. Pues bien, señores de Iberia, con la iglesia se han topado porque esto no es un retraso sino una cancelación encubierta y por lo tanto deben indemnizarnos no sólo por esto, sino por estafa. ¡Basta ya de engañar a la gente!
Ustedes quieren optimizar, pero yo también. Iba a Palma a cinco reuniones y he tenido que cancelar las tres primeras. Gracias por incrementar sus beneficios a costa de los míos.
