El Parlament balear acaba de aprobar la primera ley educativa con el apoyo del Pacto junto a Més per Menorca, Gent per Formentera y El Pi. PP, Cs y Vox han votado en contra. El conseller de Educación y Formación Profesional, Martí March, ha asegurado que se trata de una ley educativa de "continuidad" que aporta "coherencia y estructura" al sistema educativo de las Islas. Así, ha agradecido a todos los grupos menos a Vox su "voluntad de consenso y negociación" pese a no haber podido llegar a grandes acuerdos.

La discusión sobre los aspectos lingüísticos ha sido un elemento fundamental en esta negociación y, por ello, la ley no incluye el castellano como lengua vehicular. Este punto había sido introducido después de llegar a un acuerdo con el PP, aunque ayer el Pacto anunció que el acuerdo era otro y que no se iba a introducir. En cuanto a la enmienda presentada para que la ley contemplara la inmersión lingüística, solo Més y El Pi han votado a favor, con la abstención de PSIB y Podemos.

Uno de los puntos importantes está ligado con el decreto de mínimos, que establece un mínimo del 50 por ciento de horas lectivas en catalán y la autonomía de los centros para decidir el resto. March ha afirmado que se "consolida un modelo lingüístico de éxito" recogiendo los fundamentos del modelo actual para "ser capaces de crear ciudadanos plurilingües".

La vicepresidenta primera del Parlament y diputada de Unidas Podemos, Gloria Santiago, ha explicado que la presencia de su partido en el Govern ha hecho posible que el material escolar sea gratuito para las rentas más bajas, "una línea roja que hemos defendido hasta el último momento y que garantiza la igualdad de oportunidades". Santiago ha explicado que esta ley es "una victoria de la sociedad balear que impulsa la educación pública" y será un instrumento que "posibilitará un mañana mejor a las futuras generaciones".

El diputado de Més per Mallorca, Joan Mas, ha reprobado la posición del PP ante el aspecto lingüístico porque "no ha querido el consenso" y ha apuntado que "nos hubiera gustado que el PP hubiera abandonado la trinchera y hubiera vuelto a la mayoría social y política que abandonó el 2011".

El portavoz de Més per Menorca, Josep Castells, ha celebrado la aprobación de la ley aunque cree que llega "tarde". No obstante, ha agradecido el trabajo de colaboración con la conselleria y los otros grupos políticos para acercar esta ley a las peticiones al modelo defendido en el manifiesto Illes per un Pacte.

El PP ha votado en contra pese a las últimas negociaciones con March, que se vieron truncadas este fin de semana. "Votaremos en contra de esta ley y usted es el único culpable. Pensábamos que estábamos cerca y no ha sido así", ha lamentado la diputada del PP Marga Durán.

Desde Vox, que han votado en contra de la ley, ya han anunciado que la llevarán al Tribunal Constitucional. Su portavoz, Jorge Campos, ha denunciado que esta norma introduzca elementos de perspectiva de género y memoria histórica.

La portavoz de Ciudadanos, Patricia Guasp, ausente hoy en el pleno por temas personales, ha declarado que el Govern "perpetra un atroppello a los derechos lingüísticos, a la libertad de las familias y a la igualdad de oportunidades"