El Sant Antoni, a una canasta de la gloria

El deporte profesional es algo que suelen decidir los pequeños detalles. Y eso lo sufrió el Class Bàsquet Sant Antoni en sus propias carnes con el varapalo sufrido tras quedarse con la miel en los labios en la temporada 23-24, en la que se quedó a solo tres puntos de algo que ningún equipo ibicenco ha conseguido: militar en Primera FEB. El equipo de David Barrio finalizó segundo en el Grupo Este de Segunda FEB, la antigua LEB Plata, a solo dos puntos del líder, un Cartagena que consiguió el billete directo a la antesala de la Liga ACB. Los pitiusos disputaron dos eliminatorias inmaculadas ante Enrique Solar y Basquet L’Horta Godella, que sucumbieron ante la gran defensa de los portmanyíns. En la final esperaba el sevillano Morón, que en la ida planteó un partido muy físico a los de David Barrio y se llevó el gato al agua por 74-65, pero con todo por decidir en la vuelta en Sa Pedrera. La isla se volcó con el Class para el partido de vuelta consciente de lo cerca que estaba el objetivo. En el vibrante encuentro disputado en Sant Antoni, los isleños lo tuvieron en su mano pero vencieron por 83-76, por lo que en el cómputo global la victoria fue para los peninsulares.

Es cierto que en los últimos años se ha vivido en Ibiza un tremendo salto cualitativo en el deporte de la canasta de la mano del Class, que tiene enganchada a una afición que ve un ascenso meteórico en la entidad y que el futuro parece no tiene techo, pero las cosas en esta temporada 24-25 no están saliendo como se esperaba. Se retiró uno de los jugadores más importantes de la historia del club, Jordi Grimau, que ahora es director deportivo. Se hicieron unos fichajes para conformar un plantel de garantías para el asalto definitivo a Primera FEB, pero, tras nueve jornadas disputadas, la escuadra de Sant Antoni ocupa la séptima posición, con un balance de cuatro victorias y cinco derrotas, todas ellas consecutivas.

Remodelación de Sa Pedrera

Otro de los aspectos que refleja el exponencial crecimiento de la entidad y que será recordado este 2024 por la afición portmanyí es la remodelación del feudo del Class: Sa Pedrera. El Ayuntamiento de Sant Antoni sacó, por fin, a licitación el proyecto para llevar a cabo la necesaria reforma, gracias a la que se podrá superar el aforo de 2.000 personas, algo indispensable para poder acometer el ascenso. La reforma cuenta con un presupuesto total de 1,6 millones de euros, y se instalarán una Unidad Televisiva (UT) para publicidad dinámica, un sistema de megafonía y adaptaciones específicas con el fin de adaptar el recinto al nuevo aforo. El Class Bàsquet Sant Antoni parece no tener techo.