El Juzgado de Instrucción 9 de Granada ha abierto una investigación para aclarar la agresión de un hombre de 70 años que fue detenido el jueves por lesionar con un arma blanca a un familiar, el cual fue condenado por asesinar en 1985 a la hija de cuatro años del septuagenario, quien ha quedado en libertad con cargos.

Fuentes judiciales han informado hoy a Efe de que el juzgado está a la espera de tomar declaración a testigos de los hechos y que tendrá que volver a llamar a declarar al presunto agresor para averiguar qué sucedió realmente el pasado jueves día 12.

El agresor fue detenido en el transcurso de un reyerta ocurrida a la altura del número 60 de la calle Pedro Antonio de Alarcón de la capital granadina tras causar lesiones a un hombre de 54 años, al que hirió con arma blanca y provocó cortes profundos en ambas manos y en el tabique nasal.

Varias unidades de la Policía Local acudieron al requerimiento de un testigo de los hechos, un viandante que detalló que uno de los implicados portaba un arma blanca.

En el momento de la llegada de la unidad policial, los agentes observaron cómo dos hombres forcejeaban entre sí, además de una navaja abierta y ensangrentada tirada en el suelo.

En vista de las lesiones que se habían producido, se detuvo al hombre de 70 años que amenazaba al herido, al que acusaba de haberle intentado robar momentos antes, sin que hicieran constar en ese momento la vinculación que existía entre ambos, ha detallado a Efe un portavoz de la Policía Local.

Mientras esperaban a la ambulancia, el arrestado comenzó a sentirse indispuesto y también fue trasladado a un hospital, donde quedó ingresado, bajo custodia policial, ya que al parecer sufría problemas cardíacos.

Fuentes policiales informaron a Efe de que la víctima, primo carnal de la mujer del arrestado, fue detenido y condenado en 1985 como autor del asesinato de la hija del septuagenario, que tenía una carnicería en el municipio de Huétor Santillán.

La víctima fue condenada por la Audiencia de Granada a una pena de cuarenta años de cárcel, de la que cumplió más de veinte, por asesinar hace más de 33 años a la hija del ahora detenido, una menor de cuatro años a la que intentó violar y a la que tiró a un pozo.

La niña fue buscada durante días hasta que fue encontrada en el fondo de un pozo, al que habría sido arrojada con vida por su asesino, que confesó después un episodio que incluyó un intento de violación.