El próximo 14 de noviembre la Luna se acercará a la Tierra más de lo normal. Esto hará que veamos el satélite más grande de lo que estamos acostumbrados, es lo que se conoce como Superluna. Pero en esta ocasión, el fenómeno se amplifica, ya que la última vez que se pudo ver una Luna tan grande y brillante fue en 1948.

En concreto, se podrá ver el astro un 14% más grande y un 30% más luminoso. Para que no nos perdamos este espectáculo, la NASA advierte de que no volverá a repetirse una Superluna igual hasta 2034.

El término científico para este fenómeno es "Luna de perigeo". Las lunas llenas varían de tamaño debido a la forma ovalada de la órbita de la Luna. La Luna sigue una trayectoria elíptica alrededor de la Tierra con un lado ("perigeo") alrededor de 50.000 kilómetros más cerca que el otro ("apogeo"). Las lunas llenas que se producen en el lado perigeo de la órbita de la Luna parecen extraordinariamente grandes y brillantes.

No siempre es fácil notar la diferencia entre una Superluna y una luna llena normal. Un 30 por ciento de diferencia en el brillo puede ser fácilmente ocultado por las nubes y la bruma. Además, no hay elementos flotando en el cielo para medir diámetros lunares. Colgada en lo alto, sin puntos de referencia para proporcionar un sentido de escala, una luna llena se ve casi del mismo tamaño que cualquier otra.