Los rescatadores de Raju, un elefante que ha vivido 50 años atado y torturado, vivieron una experiencia increíble cuando vieron que el animal empezó a llorar justo en el momento de su liberación.

"El equipo estaba asombrado al ver cómo las lagrimas no paraban de caer por la cara de Raju durante su rescate. Fue tremendamente emocionante y todos nos dimos cuenta de que él sabía que estaba cerca de su liberación", comentó el portavoz de Wildlife SOS, la organización que se encargó de su rescate.

La vida de Raju estuvo condenada a estar atado a unas cadenas de pinchos durante 50 años, después de que unos cazadores furtivos lo capturaran en la India.

Ha cambiado de dueño más de veinte veces, y siempre viviendo bajo condiciones de abandono, malos tratos y abusos. Trabajaba forzosamente todo el día como atracción turística y se alimentaba de la comida que le podían dar los turistas y llenaba su estómago con botellas de plástico y papel.

Hace un año, el equipo de Wildlife SOS fue alertado de la penosa condición de vida de Raju por el Departamento Forestal de Uttar Pradesh. Pero, fue la semana pasada cuando pudieron intervenir para su liberación por orden judicial.

El equipo intervino a medianoche y aseguran que el animal empezó a llorar. Algunos expertos creen que estos animales tienen sentimientos, incluso de duelo, y lloran cuando se sienten superados por la emoción.

Después de aquello Raju fue trasladado al centro de Conservación de Elefantes en Mathura, donde fue alimentado con plátanos, hojas de plátano, mango, pan, galletas y agua.

Después de que las curas veterinarias le den el visto bueno, Raju podrá incorporarse a una pequeña manada con otros dos elefantes rehabilitados y podrá empezar a vivir la libertad.