Una mirada hacia el pasado con nostalgia y hacia el futuro con ilusión. Esta era la sensación que reinaba ayer en la sala del antiguo Ayuntamiento de Sant Joan, donde se estrenó la primera de las seis exposiciones de portadas de Diario de Ibiza que recorrerán los diferentes municipios pitiusos para conmemorar el 125 aniversario de la aparición del periódico, en 1893.
Un nutrido grupo de vecinos se acercó hasta la primera planta de la antigua casa consistorial para contemplar las 16 portadas, seleccionadas por el propio Ayuntamiento, y que ilustran los vertiginosos cambios operados en las Pitiusas en todas estas décadas.
Los asistentes comentaban algunos de los párrafos de dichas portadas, como el que aludía a la subasta convocada en 1934 para construir la carretera de Sant Joan a sa Cala de Sant Vicent, una obra que sin embargo no se ejecutaría hasta la década de los años 60, tres décadas después. Uno de los presentes comentaba que sus primeras vacaciones fueron posibles precisamente gracias a un sorteo que ganó con Diario de Ibiza, hace ya algunos años.
En este ambiente distendido, el alcalde de Sant Joan, Antoni Marí, tomó la palabra para dirigir unas palabras sobre el significado del 125 aniversario de Diario de Ibiza. Marí recordó cómo a principios de siglo el periódico llegaba a esta localidad con el autobús de la mañana procedente de Vila, con lo cual los vecinos del pueblo lo leían ya prácticamente por la tarde.
El alcalde comentó en su intervención algunas de las noticias que aparecen colgadas en los muros de la sala a gran tamaño, como las referidas a la recuperación de la democracia en 1975 o el terrible incendio forestal de Benirràs de hace sólo unos años. También comentó una información de principios del siglo XX que daba cuenta del cierre del colegio debido a que los maestros llevaban meses sin cobrar, por lo que los padres tuvieron que adelantar el dinero con la promesa de recuperarlo al cabo de diez años. «Igual que ahora nos pasa con Abaqua», comentaba luego en tono irónico Antoni Marí, aludiendo a determinadas infraestructuras hídricas.
«Una sociedad bien informada es más libre, y si es más libre, puede tomar mejores decisiones», afirmó el alcalde, quien destacó la «dedicación, imparcialidad y credibilidad» de Diario de Ibiza a lo largo de su dilatada historia, lo cual «ha creado un público que compra este periódico año tras año». Por ello, instó a sus trabajadores y directivos: «Seguid siendo la prensa de referencia en cuanto a imparcialidad».
La directora de Diario de Ibiza, Cristina Martín, hizo un recorrido por las principales noticias contenidas en las portadas expuestas para demostrar los cambios producidos tanto en la sociedad «y la forma de ser de los ibicencos y formenterenses», como en la propia forma de redactar las noticias, cuajadas de lo que hoy son arcaísmos y fórmulas retóricas que no dejan de ser un tesoro de la gramática. La total ausencia de la mujer, salvo para cuestiones marginales, y el atraso general que caracterizaba a la sociedad llaman la atención a quienes ahora leen los periódicos antiguos.
«El primer número de Diario de Ibiza, del 1 de agosto de 1893, publicaba una declaración de intenciones de los fundadores del periódico, basada en la defensa de los intereses generales de las Pitiusas. Esa declaración se ha mantenido igual a lo largo de los 125 años», afirmó Martín, quien hizo la salvedad de los años de la dictadura franquista y su consiguiente censura. El periódico, añadió, quería ser entonces y ha continuado siendo luego «altavoz y denuncia de las carencias de las islas».
La exposición itinerante que ayer se inauguró en Sant Joan pretende también «ser un tributo a todos los que han estado y están» en Diario de Ibiza, así como a sus lectores, pues no en vano, «sin el apoyo de quienes compran el periódico, no habríamos podido llegar a cumplir estos 125 años».
Acto seguido, el Ayuntamiento ofreció un aperitivo durante el cual el alcalde animó a los responsables del periódico a trabajar por «llegar a cumplir los 150 años» siendo además, como siempre, el principal diario de las Pitiusas.
