«Aunque Joaquín Vara de Rey sólo estuvo dos años viviendo aquí, los detalles cuentan. Haber nacido aquí en 1841 ya le hace ibicenco para siempre», ha reivindicado Carlos Martínez-Vara de Rey Novales, coronel del Ejército del Aire y tataranieto del general, al que se rindió homenaje por el 120 aniversario de su muerte en la batalla de El Caney, en Cuba, con motivo del Día de las Fuerzas Armadas en Ibiza. Bajo la presidencia del comandante general de Balears, Juan Cifuentes Álvarez, una sección del Regimiento de Infantería Palma 47 rindió honores militares a Joaquín Vara de Rey en el paseo que lleva su nombre y donde hay una estatua erigida en su honor desde el 25 de abril de 1904.

«Desde mi padre hacia atrás, hasta el siglo XV, ninguno de los Vara de Rey, una saga de militares, nace en el mismo sitio porque la familia acompañaba siempre a las tropas. Joaquín tuvo el privilegio, la suerte y la fortuna de nacer en esta preciosa isla. Aquí vio por primera vez el cielo mediterráneo un 14 de agosto de 1841. Es un gran día de hermanamiento del pueblo de Eivissa con las Fuerzas Armadas y con la familia del general», explicó el coronel, que reconoció estar «impresionado» por el acto. «Creo que Joaquín, desde allá arriba, no solo desde la estatua, estará emocionado por esta celebración», añadió Martínez Vara de Rey Novales, que el día anterior había ofrecido una conferencia sobre su antepasado.

Minutos antes del mediodía, las máximas autoridades políticas, de los cuerpos de Seguridad del Estado en Ibiza y eclesiásticas y militares retirados (como Rafael García Vila, también exdirector insular del Gobierno, y Enrique Climent, expresidente de Cruz Roja) esperaban el inicio oficial del acto. «¡A las órdenes mi general! La tropa está lista para ser revisada», gritó un integrante del regimiento desplazado a Ibiza.

Himno a los caídos

El comandante general de Balears, Juan Cifuentes Álvarez, pasó revista a la tropa y, a continuación, se dio lectura a una reseña histórica del general Vara de Rey, tanto de su batalla contra los americanos en Cuba como de su etapa en Ibiza y del monumento que preside el paseo que lleva su nombre: «Nada más conocerse la noticia de la heroica defensa de El Caney, el entonces alcalde de la ciudad de Ibiza, Josep Verdera, propuso con gran orgullo a su junta municipal darle el nombre de Vara de Rey al actual paseo en el que nos encontramos y decidió iniciar los trámites para levantar, por suscripción popular, el monumento que preside la alameda».

La reseña sobre «el héroe», como le llaman sus descendientes, concluyó con el crudo final de su vida: «Después de diez horas de reñida lucha, el 1 de julio de 1898 un puñado de españoles abandona El Caney con los heridos transportados en acémilas, llevando en una camilla al general con las dos piernas atravesadas por balas. Pero fueron cercados por los enemigos, que les hicieron una descarga a bocajarro, matando a Vara de Rey».

Tras la lectura, se entonó el himno a los caídos ´La muerte no es el final´ y posteriormente tuvo lugar el momento más emotivo de la jornada: el presidente del Consell, Vicent Torres, el comandante general de Balears y el coronel y tataranieto de Vara de Rey depositaron una corona de flores frente al monumento para reconocer la figura del general, ante la atenta mirada de la multitud de curiosos que se concentraron en el paseo como era Maria Marí, hija de militar.

El comandante general de Balears hizo hincapié en que este año se ha apostado por celebrar durante una semana el Día de las Fuerzas Armadas para estar presente en todas las islas. «Además, como coincidía con el 120 aniversario de la muerte de Vara de Rey y teníamos a una unidad haciendo ejercicios aquí decidimos que, con sus mejores galas, formasen ante el pueblo de Eivissa», remarcó el comandante general.

Cuando se retiró la sección del Ejército de Tierra del paseo, la cuarentena de descendientes de Vara de Rey que viajaron a Eivissa por este aniversario posaron frente al monumento para una instantánea que permanecerá en su recuerdo para siempre, como la figura del general.