El buque rápido ‘Aires de Formentera’, de 34,5 metros de eslora y que opera en la línea marítima entre Formentera y Eivissa con la naviera Mediterrànea Pitiusa, ha chocado esta tarde contra el muelle de Vila cuando amarraba sobre las 12.30 horas, a la altura de la estación marítima.

Al parecer, el barco colisionó con su popa contra un noray, lo que le produjo una abolladura en un voladizo. En cualquier caso, el choque no causó ni heridos ni daños estructurales en ninguna parte del barco.

El gerente de la compañía, Santiago Ferrer, quitó importancia a la colisión ya que los daños materiales no fueron importantes. «El golpe no tiene entidad», aseguró, pero destacó que lo más importante es que no hubo que lamentar ningún herido.

Tanto es así que la naviera, tras analizar los daños causados por la colisión, decidió que el barco siguiera navegando con normalidad y esperará hasta la parada técnica que tiene previsto cada año para arreglar la parte dañada. No es la primera vez que un barco sufre golpes de este tipo en las maniobras de atraque.