El Gobierno se ha comprometido con el Ejecutivo de la Comunitat Autònoma a reforzar la interconexión energética entre la península ibérica y el archipiélago, y a impulsar el empleo de renovables, de cara a avanzar en el cierre de centrales térmicas acelerando «al máximo» esta transición.

Así lo anunciaron el ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, Álvaro Nadal, y la presidenta del Govern balear, Francina Armengol, tras reunirse en Madrid en la sede del Ministerio de Energía para conversar sobre el Anteproyecto de ley de Cambio Climático elaborado por el Ejecutivo autónomo.

Nadal aseguró que desde el Gobierno se dará apoyo a la interconexión por cable de la península con Baleares para que esta comunidad no dependa en exclusiva de su producción de energía y que se fomentará el empleo de energías renovables en las islas. Así, sostiene que comparte el objetivo del Ejecutivo regional de cerrar las centrales térmicas, pero ha incidido en que para ello deben contar con otro «respaldo» a nivel energético.

Por ello, el ministro garantizó que se emplearán fondos europeos concedidos para la «descarbonización» en Balears como compensación por su insularidad, aunque advirtió de que se hará en la medida que lo permita la Unión Europea. Nadal recordó que aunque su condición insular es un plus en la asignación de estas ayudas, el alto PIB per cápita de las islas es un criterio en su contra.

Proyecto pionero

Proyecto pioneroLa presidenta balear reivindicó la ley de cambio climático redactada por su Govern como un «proyecto pionero en toda España» y ha subrayado tres aspectos fundamentales de la misma: la reconversión de la movilidad -las emisiones del transporte son las que más contaminan en el archipiélago-; el cambio del sistema energético de las islas, pasando a las energías limpias; y la eficiencia energética con medidas de «compromisos públicos y privados».