El año 2017 fue bueno para los empresarios de las Pitiüses, pero no tanto como el año anterior. Este es el resumen de la encuesta anual de la Petita i Mitjana Empresa d'Eivissa i Formentera (Pimeef), presentado ayer, y que pone de manifiesto una «desaceleración» del ritmo de crecimiento que se observa desde hace unos años, en palabras de la secretaria de esta patronal, Àngels Marí. El presidente, Alfonso Rojo, prefirió hablar de «mantenimiento» de las cifras.
En todo caso, la encuesta, realizada entre 268 pequeñas y medianas empresas de las Pitiüses, demuestra que el 56,7% de los consultados dijo que, en general, el año 2017 fue «bueno» o «muy bueno», cuando en la encuesta del año anterior fueron el 61%. Quienes dijeron que los resultados fueron malos o muy malos representan el 6,3% frente al 4,2% del año anterior.
A la pregunta de si las ventas de 2017 bajaron o aumentaron respecto a 2016 en su negocio concreto, el 38,4% declaró que han subido, pero en la encuesta del año pasado había respondido así un 50,9%. Quienes este año han dicho que sus ventas han bajado son un 18,2%, algo más del 14,5% del año anterior.
La explicación ofrecida por los responsables de la Pimeef pone el énfasis en que «el año 2016 fue especialmente bueno» y resulta difícil superar los índices alcanzados entonces. «El ciclo expansivo da muestras de desaceleración», dijo Marí, quien recordó que «la economía es cíclica y estamos entrando en una fase de mantenimiento», añadió.
Crisis en el comercio
Por sectores, «el comercio es el más perjudicado en relación a otros sectores», indicó la secretaria de la Pimeef, que acusó de este hecho a las ventas por internet y a las grandes superficies, a tenor de las respuestas de los encuestados. El sondeo revela que el número de comerciantes que declaran que sus ventas han disminuido es del 32,8%, lo que representa nada menos que casi un 12% más que el año anterior, cuando dieron esta respuesta un 21%.
En cuanto al sector de construcción, industria y transporte, su situación ha mejorado, no sólo respecto al año anterior, sino respecto a toda la reciente serie histórica. Ello es debido, a juicio de la Pimeef, a los trabajos de reformas y rehabilitación, que tiran no sólo de la construcción, sino de todas su actividades asociadas.
La hostelería y la restauración, por otra parte, acusaron una fuerte bajada de ventas. Los empresarios que afirmaron que aumentaron en 2017 fueron el 31,3%, muy lejos del 65,6% registrado un año antes. Quienes dijeron que han bajado son el doble que en 2016: del 9,8% se ha pasado al 19,4%.
A la pregunta de cuáles son las expectativas para 2018, un 27,6 opina que «será mejor que el año 2017». Sin embargo, ese porcentaje es el más bajo de todas las encuestas realizadas desde 2012. El año anterior fue de un 35,6%.
La recuperación de los mercados africanos y orientales tras años de conflictos y guerras perjudicará al turismo pitiuso, «pero esto es algo con lo que ya se contaba», señaló Alfonso Rojo.
