El 40% de los turistas extranjeros que llegan a Ibiza y Formentera son británicos y este verano este porcentaje podría verse reducido debido a una serie de circunstancias, tal y como explica el diario británico The Guardian.

Según este medio, «la codicia de los hoteleros españoles», la debilidad del dólar y la competencia turística de Oriente Medio hace que para un británico actualmente sea más barato pasar sus vacaciones en Florida, Dubái o Tailandia que en Ibiza.

El comparador de precios vacacionales Travel Supermarket asegura que los destinos de larga distancia son más baratos que España, país en el que los turistas británicos tienen un gran peso.

Para una familia de cuatro personas que van a estar de vacaciones siete noches a partir del último fin de semana de mayo le es un 144% más barato irse a Abu Dabi que a Menorca, por ejemplo.

Algo similar ocurre en temporada alta, donde destinos como Tailandia o Bali son cinco veces más baratos que Ibiza. Florida también resulta un 53% más barato, pero el hándicap que tiene en julio y agosto es que su climatología es demasiado calurosa y húmeda en comparación a Balears.

Según The Guardian, varios factores han entrado en juego para hacer que destinos más exóticos que Ibiza resulten más baratos. En primer lugar sitúa «la caída de Trump», que ha aumentado el interés por viajar a Estados Unidos. Además, tras las elecciones presidenciales norteamericanas la caída de la libra esterlina frente al dólar tras el referéndum del Brexit generó una caída de turistas británicos a EE UU, por lo que los operadores redujeron un 35% los precios para visitar el país de Trump.

Otro de los factores que cita es el «efecto español», que se traduce en un incremento de los precios de los hoteles como «consecuencia de la gran temporada de 2016», explica The Guardian. El operador turístico Thomas Cook informó el año pasado que los hoteles españoles habían aumentado sus precios en torno al 8%.

Esta dependencia del turismo británico y los riesgos que ello conlleva en el caso de que Ibiza y Formentera dejen de ser destinos preferentes ha llevado a la patronal hotelera a solicitar medidas para potenciar la promoción de las Pitiusas en otros mercados, principalmente el nacional.

Los datos del aeropuerto de Ibiza sobre llegadas que aporta la Federación Empresarial Hotelera pitiusa (Feheif) dejan pocas dudas sobre sus temores. Si el año pasado se registraron 7.903.892 pasajeros en la terminal, de esta cifra, la mitad corresponde a llegadas y la otra, a salidas, lo que arroja un total de 3.951.946 visitantes, de los cuales 1.491.832 eran ciudadanos de nacionalidad española.