El servicio de transporte público en Ibiza sólo representa el 1,7% del total de trayectos realizados en carretera durante los meses de invierno, un porcentaje que se eleva al 5% en verano. Esta es una de las carencias que se pretende mejorar con la nueva concesión de las líneas de autobús, que deberá entrar en vigor el año que viene, cuyas condiciones determinará el plan insular de servicios de transporte regular por carretera que el Consell de Ibiza prevé aprobar en un plazo de tres meses.
De cara a realizar su plan de mejora del transporte público, el Consell presentó ayer el diagnóstico sobre el estado actual de este servicio y sus principales conclusiones, como el hecho de que «está diseñado para las necesidades de los turistas y no de los residentes», según indicó la consellera de Movilidad, Pepa Marí. Así,mientras en verano la media de pasajeros diarios es de 27.000, esta cifra se reduce hasta 6.000 en invierno.
El estudio, elaborado por la empresa Centro de Estudios y Movilidad, apunta entre sus principales objetivos que el transporte pública llegue a ofrecer una media de una parada de autobús a una distancia de 600 metros para el 80% de la población de la isla (300 metros en el caso de Ibiza).
Para ello, cabe adecuar el servicio a las necesidades de transporte de los residentes, una relación que está actualmente descompensada y que se ejemplifica con el caso de Santa Eulària: mientras que el 86% de los trayectos en transporte público en este municipio sirven para desplazarse a Vila o a es Canar, estos dos destinos se reducen al 50% en el caso de los desplazamientos en vehículos particulares.
Entre las mejoras del servicio apuntadas a raíz de este diagnóstico también se incluye la puesta en marcha de un servicio nocturno durante los meses de invierno, así como el aumento de la conectividad con el Hospital Can Misses, el puerto, el aeropuerto y el centro de Vila.
Transporte escolar
El diagnóstico también advierte de las deficiencias en el transporte escolar, como la ineficiencia en los itinerarios, con «alto índice de rodeo», y un solapamiento de hasta el 45% con la red pública convencional. Por ello propone también que el servicio de autobús escolar se integre en una sola red de transporte con las líneas regulares.
Otras medidas propuestas para optimizar el servicio incluyen «un sistema de transporte adaptado a la configuración viaria de la isla, la mejora de los sistemas de información al usuario o el establecimiento de una marca única para una mejor identificación del sistema de transporte público de Ibiza», según destaca este estudio.
La consellera Pepa Marí admitió que el diagnóstico presentado ayer «no da sorpresas» en los datos aportados, pero destacó que sirve de «primer paso para las nuevas concesiones», que el Consell prevé sacar a concurso durante el tercer trimestre del año y poder adjudicar el servicio a principios de 2019.
