Tanto el Partido Popular (PP) como la Federación Empresarial Hotelera de Ibiza y Formentera (Fehif) mostraron ayer su predisposición a estudiar «algún tipo de medida» para limitar la entrada de vehículos en la isla de Ibiza, a semejanza de lo que se prevé para Formentera, si bien se declararon incapaces de aventurar una propuesta concreta, dada la «complejidad» que ello representa.

El portavoz del PP en el Consell, Mariano Juan, recordó que el último Consell de Alcaldes acordó encargar un diagnóstico sobre la carga automovilística que sufre la isla de Ibiza, «aunque en realidad no hace falta ningún diagnóstico para saber que en verano hay muchos coches en la isla».

Dicho estudio, aparte de diagnosticar la situación, «debería aportar ya alguna idea o propuesta para luego ver qué soluciones se pueden adoptar», afirmó Juan. En todo caso, el portavoz del PP en el Consell admitió: «Alguna medida se tendrá que tomar», puesto que, aparte de la congestión que sufren las carreteras, «existe luego el problema del aparcamiento».

El grupo del PP advierte también de que «los turistas han de continuar viniendo a la isla», por lo que «cualquiera que sea la fórmula que se adopte no ha de ir en detrimento del turismo». «Habrá que compaginarlo todo», señaló.

También observó que «será complicado decir a quienes vienen de la Península con su coche que no vengan; no sé en Formentera cómo lo harán».

«No sé cómo se puede hacer»

«No sé cómo se puede hacer»

Mariano Juan declinó anticipar su postura sobre la moción que presentará Podemos en el pleno del Consell: «No la he leído y no puedo opinar aún», señaló.

El presidente de la patronal hotelera pitiusa, Juan José Riera, se declaró inequívocamente «a favor» de limitar la llegada de vehículos a la isla de Ibiza, pero en todo momento recordó las grandes dificultades jurídicas que entraña esta decisión. «Algo tendremos que hacer para limitar el número de coches que llegan a la isla, pero creo que chocaremos con las normativas de la Unión Europea, donde hay libre circulación de personas, mercancías y vehículos». «Veríamos bien lo de limitar, pero realmente no sé cómo se puede hacer», confesó.

Riera recordó que en 2015 las propias multinacionales que funcionan en Ibiza declaraban tener 18.000 vehículos en verano, pero esta cifra llegó hasta los 22.000 al año siguiente.

A esto se añade el problema de la población dispersa, «pues en cada casa de campo hay dos coches, y encima no hay un adecuado transporte público», añadió el presidente de los hoteleros.

La moción que presentará Podemos al pleno del Consell ibicenco reclamará al Govern balear que incluya también a la isla de Ibiza en un proyecto de similares características al de Formentera. La propuesta parece tener asegurada su aprobación, dado que el grupo del PSOE, socio de Podemos-Guanyem, ha anunciado su acuerdo con una medida de este tipo.

Mientras tanto, la junta de portavoces del Consell de Formentera se reunió ayer y por unanimidad acordó «trabajar en consenso» para continuar adelante con los trabajos destinados a implantar una regulación de la llegada de vehículos a la isla.