Ibiza dispone de menos funcionarios de la Comunitat Autònoma que en Menorca, pese a que tiene más de 50.000 habitantes más. Més per Menorca ha presentado una proposición de ley en el Parlament balear al objeto de corregir «la desventaja que supone para los ciudadanos de las islas menores acceder a la función pública».
El partido menorquín sostiene que «el desajuste» entre el número de trabajadores públicos en cada isla y el número de puestos que les correspondería por su población es «importante». Mallorca, que concentra el 78,5% de la población de Balears, dispone del 87,1% de los puestos de trabajo de la Administración general, según los datos de 2016, y, en cambio, en el resto de las islas hay «un déficit». Menorca cuenta con el 6,5% de los puestos de trabajo por el 8,8% de la población y el caso de las Pitiüses aún es «más acusado». Ibiza dispone del 6% de los funcionarios (menos que Menorca) por el 11,8% de la población y Formentera dispone del 0,4% de los empleados públicos cuando su población es del 0,9%.
Més per Menorca considera que las Pitiüses deberían duplicar sus puestos de trabajo en la administración general para alcanzar «un escenario de igualdad de acceso a la función pública para todos los ciudadanos de Balears». Así, Menorca debería aumentar la nómina de funcionarios del Govern con 150 personas más, mientras que Ibiza precisaría de 370 más y Formentera de 30.
La proposición de ley justifica que hace un tiempo sólo cabía «resignarse» ante esta situación, pero que ahora «el uso de las nuevas tecnologías, especialmente en la administración pública, abre nuevas perspectivas para corregir un agravio histórico». Se refiere también a la obligación de los diputados y representantes de las islas menores en los órganos colegiados de la Administración a desplazarse a Mallorca, lo que implica «un esfuerzo económico y de dedicación de tiempo totalmente desproporcionado respecto a las personas que residen en Mallorca».
Por ello, la proposición de ley contempla el uso generalizado de la videoconferencia (habilitando un espacio adecuado en cada Consell) para participar en estas reuniones (y en las comisiones parlamentarias) sin viajar a Mallorca. Pero como habrá reuniones en las que es ineludible hacer acto de presencia, Més propone otro sistema retributivo para «indemnizar de forma justa la inversión de tiempo que suponen los desplazamientos desde las islas menores».
Propuesta de nuevas dietas
Así, la misma proposición de ley incluye un anexo con una propuesta de indemnizaciones para las personas que se desplazan desde las islas menores a Mallorca para asistir a reuniones de los órganos colegiados de la Administración, como, por ejemplo, el consejo de administración de IB3
Més per Menorca plantea que para los desplazamientos, aparte del billete de avión, se abone, previa presentación de los comprobantes, el importe del aparcamiento del aeropuerto de origen y el traslado de ida y vuelta en taxi o autobús. Para la manutención se plantea el pago de un máximo de 20 euros por cada comida, y 100 euros como mucho para la noche de hotel en Mallorca.
Además, se introduce una compensación económica por desplazamiento «a razón de 10 euros la hora», que se contarían a partir del momento del embarque en el vuelo de ida hasta la hora real de aterrizaje en el vuelo de regreso.
