La falta de un informe preceptivo de la Demarcación de Costas de Balears mantiene bloqueado desde hace casi un año el proyecto de soterramiento de los principales tendidos eléctricos y telefónico del Parque Natural de ses Salines de Ibiza. Esto impide completar la tramitación administrativa e iniciar los trabajos, que obligatoriamente deben estar terminados a finales de 2019 para que no se pierda la subvención estatal que los financia.

Un portavoz del equipo de gobierno del Consell de Ibiza confirmó que «el asunto es serio», puesto que la obra se pagará con fondos estatutarios, procedentes del Gobierno central, que pueden peligrar si se incumplen los plazos establecidos.

Todos los trámites han sido ya completados a lo largo de las tres últimas legislaturas del Consell, y sólo faltaría, aparte del informe de Costas, uno de la dirección general de Recursos Hídricos del Govern, «pero que se emitiría rápidamente», según ha confirmado este organismo autonómico al Consell. En todo caso, Recursos Hídricos tampoco puede dictaminar sobre el proyecto hasta que Costas lo haga primero.

En marzo de 2017 la institución ibicenca solicitó formalmente a la Demarcación de Costas en Balears el citado informe para continuar la tramitación. Dado que no llegaba a emitirse nunca, el Consell fue insistiendo a su responsable, Carlos Simarro, a través de diversos conductos, según añadió el equipo de gobierno.

Seis meses después de solicitarlo por primera vez, Costas dirigió una carta al Consell en el que aclaraba que la falta de respuesta del organismo no suponía la aprobación del proyecto por silencio administrativo y justificaba el retraso en la contestación a la falta de medios humanos en la oficina de Balears.

«Bastante desesperados»

«Bastante desesperados»

«Estamos bastante desesperados. Hemos hechos todas las gestiones habidas y por haber», afirmó ayer una responsable de la institución insular encargada de llevar a cabo las gestiones.

El proyecto del Consell consiste en la supresión de 3,6 kilómetros de tendidos aéreos de líneas eléctricas en el interior del Parque Natural, concretamente al este de Sant Francesc. También se suprimirán 1.850 metros de tendidos telefónicos y se crearían, paralelamente, cuatro kilómetros de senderos para el disfrute de espacio natural, distribuidos en dos recorridos diferentes. Uno de ellos será exclusivamente peatonal.

1,8 millones de presupuesto

1,8 millones de presupuesto

El presupuesto de las obras es de 1,8 millones de euros, que proceden de los fondos estatutarios que el Estado destina a las islas para compensar el déficit histórico de inversiones en la Comunitat Autònoma.

La supresión de las torres eléctricas que discurren por la ladera del Puig des Corbmarí conllevará la eliminación, además, de dos transformadores que causan un fuerte impacto: uno cerca de la torre de sa Sal Rossa y otro en la propia ladera de la montaña.

Sólo quedará visible la línea de alta tensión que suministra energía a la isla de Formentera, pues otra que había anteriormente ya fue soterrada y ahora discurre bajo la carretera.

El proyecto conllevará una mejora para las poblaciones de aves que hay en ses Salines, pues se eliminará en gran parte uno de sus mayores enemigos: los tendidos aéreos contra los que suelen chocar.