El ibicenco Antonio Planells Palau ha sido ascendido a general de división de Infantería de Marina, el puesto más alto en el escalafón. Además, ha sido nombrado comandante general de la Infantería de Marina española. Hasta ahora, durante algo más de tres años, ha ocupado el segundo puesto de mando en Infantería de Marina (general de brigada). Hijo de un coronel y nieto de un sargento, Planells es uno de los militares ibicencos que más alto han llegado en su carrera en el Ejército.

Planells, que reside en la base de San Fernando, en Cádiz, formó parte del primer contingente de observadores en la misión de la ONU en Centroamérica en 1990. Al finales de los 90, estuvo al mando de un subgrupo táctico en la misión de SFOR en Bosnia. También fue el primer oficial español de enlace en Quántico, sede de los Marines.

Esta última experiencia fue «un honor y un privilegio», según explicaba Planells el pasado mes de julio en una entrevista con este diario. «A mi llegada, allá por el año 2006, las Fuerzas Armadas de aquel país (EE UU) estaban totalmente inmersas en la estabilización de Irak. Era una época francamente dura en la que, desde el punto de vista profesional, fueron muchas las experiencias y lecciones aprendidas que nos sirvieron a los infantes de marina españoles para mejorar nuestra preparación y adiestramiento», explicaba.

Precisamente, al ser preguntado en julio sobre si el siguiente paso que le quedaba en su brillante carrera militar era el ascenso a general de división, Antonio Planells respondía: «Y el último, y desde luego será la Armada la que decida si soy el más idóneo para seguir o, por el contrario, que es momento de retirarme y venir a pasar temporadas de invierno en mi tierra».