El próximo año será "clave" para la transformación del puerto de Ibiza. Pero todo está a expensas aún de que el Gobierno ratifique la nueva delimitación de la zona portuaria (DEUP). Ese todo son los 33 millones de euros que la Autoridad Portuaria espera adjudicar en cuanto se apruebe del documento en distintas inversiones, según ha anunciado esta mañana su presidente, Joan Gual de Torrella, tras el consejo de navegación celebrado en la isla.

Aunque la DEUP se esperaba que iba a tener una tramitación rápida antes de su ratificación en Consejo de Ministros, el presidente de la APB explicó que a día de hoy sólo ha informado el documento "uno de los siete ministerios" que deben pronunciarse. Con todo, espera "que en tres meses" lleguen el resto de respuestas, para poder aprobar definitivamente la delimitación.

Gual ha detallado que entre estas actuaciones está el nuevo aparcamiento subterráneo, que se calcula que costará unos 17 millones de euros y tendrá una capacidad para 691 vehículos en una sola planta, que se extenderá desde la parte posterior del Club Náutico hasta la rotonda de los podencos. El alcalde de Vila, Rafa Ruiz, ha recordado que en su momento, los vecinos de la Marina que solicitaron una tarjeta de acceso para vehículos a la zona de los andenes fueron "una veintena" y considera que es una cifra "asumible" para el concesionario de este aparcamiento deba permitirles estacionar sin coste. "Lo pelearemos", ha dicho.

En paralelo a esta obra, que el presidente de la APB cree que se podría iniciar "el próximo octubre", también se quiere acometer la construcción de la nueva terminal de Formentera, con otros ocho millones de presupuesto. La versión definitiva de las instalaciones contempla situar los cuatro bloques en que se dividirá la estación marítima en la zona que ocupan actualmente los pescadores. Se ha optado por varias edificaciones, para reducir el impacto que tendría una única construcción del volumen que se requiere para un tráfico de más de un millón de personas al año.

Aunque, además de los mostradores de las navieras, "que querían un único edificio", matizó un representante de la APB, en los cubos que se han proyectado, de baja altura y unidos por una gran pérgola, habrá "usos comerciales". Pero el alcalde recordó que sólo se permitirán negocios "complementarios" al tráfico marítimo.

En cuanto a la nueva estación marítima para las líneas con la Península, Gual de Torrella explicó que es el proyecto con la tramitación "más avanzada", ya que no se ve afectada por el DEUP, y se calcula que costará otros ocho millones de euros. Para no interferir la actividad del puerto en verano, las obras podrían empezar también después de la próxima temporada. Para el diseño de la terminal, al que se están dando los últimos retoques para presentarlo a final de año, se han seguido las restricciones que proponían los técnicos de Vila para adaptar el edificio "a la tipología ibicenca", según ha añadido Ruiz. Será de planta baja y primer piso, con terraza practicable en el tejado y de una superficie "menor" que la que se planteaba en el proyecto básico.

Toque de atención a Marina Ibiza

Gual de Torrella ha reiterado que su objetivo sigue siendo el de abrir el puerto a la ciudad, para que los vecinos puedan pasear "de faro a faro" junto al mar. En esta línea, ha lanzado una advertencia a los responsables de Marina Ibiza, recordándoles las inversiones a las que se comprometieron el año pasado para renovar la concesión. No se trataba sólo de retirar las vallas, ("un gesto simbólico", como lo ha definido Rafa Ruiz), sino que deben garantizar la continuidad en el interior de la concesión del paseo marítimo que proyecta la APB para todo el puerto. La ratificación de la renovación de la concesión "está supeditada" a que cumplan sus compromisos, ha advertido el presidente. "Estamos dispuestos a exigírselo", ha insistido antes de declararse "confiado" en que la marina acometerá las inversiones previstas para permitir el paso "hasta los pantalanes".

El presidente de Puertos también ha recalcado que también en Marina Botafoch, cuya renovación está en una etapa más inicial, se deberán retirar las vallas y permitir el paso "en primera línea del mar".